La gestión efectiva de la basura comienza cuando evitas el consumo de productos que realmente no son necesarios y que además llevan consigo elementos que en muy poco tiempo van a convertirse en basura. Continúa con la reutilización, reciclaje y recuperación de los residuos.

En nuestro país la gestión efectiva de la basura debe ser una prioridad de las próximas autoridades. Tiene importantes implicaciones de salud pública, ya que es uno de los dos principales portadores y propagadores de enfermedades infecciosas (el otro portador es el agua). Además Los residuos que se incineran o se eliminan en sitios no controlados contaminan el aire, la tierra y el agua.

En ese contexto, le dedico esta entrega a examinar las recomendaciones que nos hace la ONU para la gestión efectiva de la basura. Complemento con cinco ejemplos de ciudades con una gestión efectiva de la basura. Y no olvidemos que, “es un asunto de todos”.

Una cultura que propicia la acumulación de basura

Los panameños queremos vivir en una ciudad que sea una “tacita de oro”; con una Autoridad de Aseo que brinde (pero no lo hace), como reza su Misión, “servicios de recolección y disposición final de residuos sólidos de forma eficiente, con miras a proteger la salud pública, velar por la conservación del ambiente y el aprovechamiento de los desechos…”.

Pero al mismo tiempo, botamos cualquier clase de desechos en calles, veredas y ríos. Nos limitamos a esperar que vengan los de la Autoridad de Aseo y recojan todas las porquerías que arrojamos. Y como eso no ocurre con la frecuencia debida, sobre todo en los barrios menos favorecidos, la basura se acumula convirtiéndose en criadero de alimañas y fuente de enfermedades. Paradójicamente, hacemos poco o nada a nivel individual, familiar y comunitario por remediar esta situación. Esperamos que sea la autoridad de aseo quien se encargue de resolver el problema que producimos. Olvidamos que la gestión efectiva de la basura es un asunto de todos.

Como si fuera poco, al final la basura va a parar a un relleno sanitario _que es la peor opción según los expertos_. Allí también es causa de contaminación ambiental y enfermedades. Lo cual se agrava por los frecuentes incendios que padecemos los capitalinos, causando una grave contaminación del aire. Amén de la mala impresión en inversionistas y turistas, lo que repercute en la pérdida de reputación y oportunidades de inversión.

Gestión efectiva de la basura

De acuerdo con ONU-HABITAT , “la gestión eficaz de los residuos es esencial para lograr ciudades saludables y competitivas, sin embargo, muchos municipios tienen problemas para mantener las ciudades limpias debido a que el costo de la gestión de residuos sólidos en ciudades de tamaño mediano puede suponer un 50 por ciento del presupuesto total del municipio. En ese sentido subraya que “Reducir, reutilizar, reciclar y recuperar son la piedra angular de la mayoría de las estrategias para la gestión efectiva de la basura (residuos)”. Veamos qué significa cada uno, y conoce más aquí.

• Reducir: consiste en evitar el consumo de productos que realmente no son necesarios y que además llevan consigo elementos que en muy poco tiempo van a convertirse en basura, como por ejemplo productos con un exceso de embalaje. No solo se puede reducir en términos de consumo de bienes, también en energía optimizando, por ejemplo, el uso de las lavadoras o luces encendidas.
• Reutilizar: implica dar un segundo uso a aquellos productos que ya no son útiles para la tarea que por la cual se adquirieron o bien repararlos para que puedan seguir cumpliendo con su función. Muchas de los objetos que son desechados podrían volver a usarse como por ejemplo, el papel de regalo.
• Reciclar: significa hacer una selección de los residuos generados para ser tratados en plantas especializadas creando productos para otros usos. De esta manera, se evita el uso descontrolado de recursos naturales, se ahorra energía y se reducen el volumen de residuos.
• Recuperar: se relaciona con los procesos industriales y consiste en recuperar materiales o elementos que sirvan como materia prima. Por ejemplo, los plásticos se pueden recuperar mediante el proceso de pirólisis (por calentamiento) o los materiales utilizados en la fabricación de latas.

Cinco ejemplos de ciudades con una gestión efectiva de la basura

A continuación se presentan algunos ejemplos de sitios que tienen una gestión efectiva de la basura:

• La ciudad de San Francisco, California, es conocida por su programa de reciclaje de residuos orgánicos, que convierte los restos de alimentos y otros residuos orgánicos en abono. La ciudad también tiene un programa de recolección selectiva de residuos que separa los residuos de papel, plástico, metal y vidrio para su reciclaje.
• La ciudad de Tokio, Japón, tiene un sistema de gestión de residuos muy eficiente que reduce la cantidad de residuos que se envían a los vertederos. La ciudad utiliza una combinación de medidas, como la reducción, la reutilización, el reciclaje y el compostaje, para alcanzar su objetivo de reducir la cantidad de residuos en un 25 % para 2025.
• La ciudad de Oslo, Noruega, es una de las ciudades más sostenibles del mundo en términos de gestión de residuos. La ciudad tiene un sistema de recolección selectiva de residuos que recicla el 99 % de los residuos. Oslo también utiliza el compostaje para convertir los residuos orgánicos en abono y la incineración para generar energía a partir de los residuos no reciclables.
• La ciudad de Vancouver, Canadá, tiene un sistema de gestión de residuos que se centra en la reducción y la reutilización. La ciudad ofrece incentivos a los residentes para que reciclen y composten, y también ha implementado una serie de medidas para reducir el consumo de productos desechables.
• La isla de Aruba, en el Caribe, tiene un sistema de gestión de residuos que se centra en la sostenibilidad ambiental. La isla utiliza una combinación de medidas, como el reciclaje, el compostaje y la incineración, para reducir la cantidad de residuos que se envían a los vertederos.

Estas son solo algunas de las muchas buenas prácticas que se están implementando en todo el mundo. Al implementar estas prácticas, podemos ayudar a crear un futuro más sostenible.