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Cobertura Universal de Salud

Actualización el 26 de septiembre de 2023

Cobertura Universal de Salud

Actualizo esta publicación sobre Cobertura Universal de Salud invitándolos a la lectura de la Declaración de los dirigentes mundiales en la reunión de alto nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la Cobertura Universal de Salud. Mantengo la información más reciente disponible en las páginas de OMS y OPS, y un listado de las publicaciones en este blog sobre este importante asunto. Además elimino información que considero ha perdido su vigencia.

No olvidemos que, a pesar de que muchos países, entren ellos el nuestro, destacan en sus Constituciones el derecho a la salud; el acceso universal, gratuito, continuo y permanente a servicios integrales de salud, es una deuda pendiente y nos queda mucho por hacer. No obstante, en ese ámbito del “quehacer pendiente”, hay un claro consenso mundial, el cual es evidente cuando todos los países están avanzando, de acuerdo a sus posibilidades, hacia la Cobertura Universal de Salud, CUS, y cuentan con el apoyo explícito de las principales organizaciones mundiales dedicadas a promoverla (OPS/OMS, BM, BID, entre otras).

Este consenso ha surgido como consecuencia de la abundante evidencia que muestra que la Cobertura Universal de Salud puede brindar importantes beneficios: para los individuos, en términos de acceso a los servicios de salud y protección de la ruina financiera causada por la mala salud; para los países en su conjunto, en términos de salud de la población y contribución al crecimiento económico; y para los políticos, a fin de apoyarlos en la formulación de sus planes de campaña y de gobierno.

Cobertura Universal de Salud: ¿de qué estamos hablando?

¿Qué es la Cobertura Sanitaria Universal?

De acuerdo con la más reciente actualización de la OMS, la cobertura sanitaria universal implica que todas las personas puedan acceder a toda la gama de servicios de salud de calidad, cuando y donde los necesiten, sin sufrir dificultades económicas. Abarca toda la gama de servicios de salud esenciales, desde la promoción de la salud hasta la prevención, el tratamiento, la rehabilitación y los cuidados paliativos a lo largo del curso de la vida. La expresión engloba dos conceptos de cobertura relacionados entre sí:

En ese sentido, la vigilancia de las desigualdades en materia de salud es esencial para identificar las poblaciones desfavorecidas y hacerles un seguimiento a fin de proporcionar a las instancias decisorias una base científica para formular políticas, programas y prácticas más orientados a la equidad, con miras a un avance progresivo hacia la CSU. En cuanto a los ODS, los avances en materia de CSU se miden mediante dos indicadores:

En el repositorio de datos del Observatorio Mundial de la Salud de la OMS se pueden consultar datos detallados sobre la CSU.

Breve resumen de datos y cifras

¿Por qué es importante avanzar hacia la Cobertura Universal de Salud?

La Cobertura Universal de Salud “no es solo una cuestión de salud sino también una cuestión propia del desarrollo”, la cual produce claros beneficios sanitarios, económicos y políticos. Todos interrelacionados…

No me detendré a describir los beneficios sanitarios porque son evidentes para propios y extraños. De hecho, basta con echarle una mirada a las estadísticas vitales del INEC de los últimos 15 años y verificar con desaliento y tristeza que no avanzamos _ a pesar de que contamos con los conocimientos y recursos para que no fuera así _ en el control efectivo de las principales causas de enfermedad y muerte en nuestro territorio.

Sobre el asunto de los beneficios políticos, subraya la OMS que, si se financian de forma sostenida y se aplican adecuadamente, las reformas destinadas a promover la cobertura universal generan salud y bienestar, por lo que pueden proporcionar réditos políticos y ganar el respaldo popular. Sobre este punto, la población debe cuidar del buen uso de los fondos públicos y vigilar que las propuestas del gobierno y los aspirantes a serlo, no se limiten a la construcción de hospitales y centros de salud, los cuales muchas veces ni siquiera llegan a inaugurarse.

Sin embargo, también conviene subrayar que el inicio de las reformas para alcanzar la cobertura universal, tiene que planificarse por adelantado y con mucho cuidado, sobre todo para garantizar su sostenibilidad final frente al aumento inevitable de la demanda de asistencia sanitaria. Es peor hacer promesas que no se pueden cumplir que no prometer nada. Entonces, cuidado con andar prometiendo cosas solo con el afán de conseguir el voto de la ciudadanía en las próximas elecciones.

¿Cómo pueden los países acelerar los progresos hacia la CUS? 

A continuación les presento el “famoso” cubo de la Cobertura Universal, invitándolos a reflexionar sobre ¿quién está cubierto?, ¿qué servicios están incluidos?, ¿cómo se financia?

Avanzar hacia la CSU supone un proceso de realización paulatina. Se trata de lograr progresos en varios (los tres) frentes y para todas las personas. No obstante, habrá que buscar el mejor equilibrio entre las tres dimensiones del “cubo”, ya que el progreso a lo largo de solamente una dimensión podría afectar a las demás. Por ejemplo, prometer servicios gratuitos de salud es una estrategia ineficaz si hay desigualdad en el acceso o si los servicios son de mala calidad. Amén de los efectos potenciales en la sostenibilidad del sistema.

Es evidente entonces que el objetivo último de la CUS es llenar el cubo más grande representado más arriba, dándole respuesta a las tres interrogantes, pero…

El tema de la organización y gestión de las redes Integradas de Servicios de Salud, RISS, superando la fragmentación, para garantizar la eficiencia, eficacia y equidad que implica la CUS lo pueden ver en mis publicaciones sobre las RISS en este blog.

Finalmente, a riesgo de ser repetitivo, me apoyo en el informe del “WISH Universal Health Coverage Forum 2015”, y destaco que:

¿Cómo pueden las reformas de la financiación sanitaria acelerar los progresos hacia la CUS?

Para financiar los servicios de salud que requiere la población, los gobiernos tienen que considerar: ¿cómo recaudan suficientes recursos financieros para sufragar los costos del sistema de salud?, y cómo aglutinan de forma eficiente estos recursos.

Sobre el tema de la recaudación, es de vital importancia la negociación entre los ministerios de salud y los ministerios de economía finanzas, ya que ambos comparten el reto de obtener fondos suficientes y de utilizarlos de forma eficiente para atender la creciente demanda de servicios de salud por parte de la población. Y lo que se invierta en salud, deja de invertirse en cualquier otro sector.

Sobre el asunto de la gestión efectiva de los recursos financieros; el Grupo de trabajo de la OMS concluye que la “mancomunación de recursos financieros es la mejor opción para poder satisfacer las demandas cada vez mayores de cobertura de servicios es un desafío político y técnico de primer orden”. 

La mancomunación consiste en la acumulación de contribuciones aportadas por adelantado por particulares en un fondo común que posteriormente se utiliza para pagar los servicios prestados a todos los miembros del fondo según las necesidades. Reduce o elimina los riesgos financieros asociados a la mala salud. Contribuye a la equidad.

Los mecanismos utilizados para financiar los servicios sanitarios se pueden clasificar en dos categorías principales: voluntarios y obligatorios. Ambos se pueden mancomunar.

De acuerdo a la OMS, Banco Mundial, la Comisión Lancet, y a la mayoría de los pensadores sobre el tema: “los resultados de los sistemas voluntarios son incompatibles con el objetivo de la Cobertura Universal de Salud, ya que los pobres quedan excluidos y las personas sanas no subvencionan a las enfermas. Debido a esta selección adversa y a la exclusión de los pobres, ningún país del mundo ha logrado acercarse a la cobertura sanitaria universal utilizando el seguro voluntario como principal mecanismo de financiación”.

Un comentario especial sobre la posible “mancomunación de fondos en Panamá

Nos estaríamos refiriendo claramente a la creación de un “Fondo Nacional de Salud” (superando la actual Segmentación) alimentado por los fondos provenientes de los impuestos, vía presupuesto del MINSA y los fondos de la Caja de Seguro Social. Esto, junto con la creación de una sola Red de Servicios (superando la actual fragmentación) se dice fácil y sobran los argumentos a favor, (técnicos, financieros, éticos, morales y hasta legales), pero requiere de mucha negociación entre todos los afectados. En la siguiente gráfica comparto una idea para invitarlos a la reflexión sobre este asunto…

En todo caso, cualquier mecanismo de financiación debe cumplir con los siguientes tres criterios:

Resoluciones que amparan la Cobertura Universal de Salud

En este ámbito comparto de entrada dos importantes Resoluciones, de las cuales somos signatarios como país y por ende estamos obligados éticamente a desarrollar en nuestro contexto:  la Resolución de la Asamblea General de las Naciones aprobada por unanimidad en diciembre de 2012 en la cual se hace un llamado a todos los países a planificar o realizar la transición de sus sistemas de salud hacia la Cobertura Universal de Salud; y la Resolución CD53.R14 del Consejo Directivo de la OPS, disponible en  en la cual se resuelve aprobar la Estrategia para el acceso universal a la salud y la Cobertura Universal de Salud, y se insta a los Estados Miembros a tomar acción, teniendo en cuenta su contexto y prioridades nacionales. También los invito a visitar la página de la OPS dedicada al tema.

Líneas de acción de la Estrategia

La estrategia es una expresión del compromiso de los estados miembros de la OPS para avanzar hacia el logro de la Cobertura Universal de Salud. La estrategia identifica cuatro líneas específicas de acción, simultáneas e interdependientes para guiar a la región en el futuro:

  1. ampliar el acceso equitativo a servicios de salud integrales, de calidad, centrados en las personas y las comunidades;
  2. fortalecer la rectoría y la gobernanza;
  3. aumentar y mejorar el financiamiento para apoyar las intervenciones de salud pública y garantizar la protección financiera de los individuos, eliminando el gasto de bolsillo;
  4. el fortalecimiento de la acción intersectorial que permita abordar los determinantes sociales de la salud.

Hoja de Ruta internacional

Como consecuencia de ello, en ese mismo Consejo Directivo, las autoridades de salud acordaron la siguiente Hoja de Ruta:

  1. Avanzar hacia el acceso universal a servicios de salud integrales que atienden las necesidades de salud de las personas, incluidas las necesidades de grupos vulnerables.
  2. Progresar hacia la eliminación del pago de bolsillo para la atención de salud que constituye una barrera para el acceso en el punto de entrada del servicio, reemplazándolos por un fondo mancomunado, que se basa en el principio de la solidaridad y que incluye impuestos, ingresos fiscales y otras fuentes de financiamiento.
  3. Establecer objetivos y metas nacionales y una hoja de ruta para avanzar hacia el acceso universal a salud y hacia la Cobertura Universal de Salud colocando prioridades nacionales durante el 2014 del período a 2019.
  4. Mejorar la organización, la gestión y la eficiencia de los servicios de salud usando modelos de atención de salud que se centran en las necesidades de personas y las comunidades.
  5. Mejorar el primer nivel de atención mediante el fortalecimiento de equipos de salud multidisciplinarios y redes integradas de servicio de salud.
  6. Incrementar opciones laborales, especialmente en el primer nivel de atención, con condiciones de trabajo atractivas e incentivos, particularmente en áreas sub atendidas y proporcionar a los trabajadores de la salud acceso a información así como servicios de telesalud (incluida la telemedicina).
  7. Fortalecer la capacidad de liderazgo de las autoridades de salud para influenciar en políticas y legislación en otros sectores que repercuten en la salud y en las condiciones sociales que impactan la salud.

Hoja de Ruta  de Panamá

Por su parte las autoridades de salud de Panamá decidieron aprobar su propia Hoja de Ruta para la Cobertura Universal de Salud, seleccionando las siguientes cuatro Líneas Estratégicas, que deberemos desarrollar como país:

  1. Ampliar el acceso equitativo a servicios de salud, integrales, de calidad, centrados en las personas y las comunidades.
  2. Fortalecer la rectoría y la gobernanza.
  3. Aumentar y mejorar el financiamiento, con equidad y eficiencia, y avanzar hacia la eliminación del pago directo que se convierte en barrera para el acceso en el momento de la prestación de servicios.
  4. Fortalecer la coordinación intersectorial para abordar los determinantes sociales de la salud.

Contexto político, económico, social y ambiental para el desarrollo de la CUS

Finalmente, complementando la argumentación previa sobre la Cobertura Universal de Salud, comparto con ustedes una imagen gráfica disponible en el Duodécimo Programa General de Trabajo, OMS 2014–2019, que ilustra las nuevas realidades a nivel político, económico, social y ambiental. Aunque se refiere al contexto mundial, es claramente aplicable a cualquier país y se debe tener presente a la hora de formular nuestra propuesta.

Por otro lado la publicación de la OPS “Salud en las Américas 2012 nos señala los siguientes “Retos históricos de los sistemas de servicios de salud en las Américas”. Todos, sin excepción son aplicables a Panamá. 

Declaración Política de la Reunión de Alto Nivel sobre Cobertura Sanitaria Universal

El fundamento que deja patente cuán urgente es esta declaración es el siguiente: “al menos 4,500 millones de personas —más de la mitad de la población mundial— no estaban totalmente cubiertas por servicios de salud esenciales en 2021. Dos mil millones de personas tenían dificultades financieras, y más de 1,300 millones se veían abocadas a la pobreza, o aún más hundidas en ella, simplemente por tratar de acceder a servicios de atención de salud básica…”

Por tan contundente razón, en la reunión de alto nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), los dirigentes mundiales han aprobado hoy una nueva declaración política titulada “Cobertura sanitaria universal: ampliemos nuestras aspiraciones para la salud y el bienestar en un mundo pos-COVID”.

La declaración es muy extensa _ 45 considerandos y 64 compromisos _ pero es obligatorio que la leamos y reflexionemos sobre cómo cumplir para que la cobertura universal de salud deje de ser una quimera para la mitad de la población mundial y un millón de panameños. Pueden leer y bajar una traducción libre la declaración aquí.

Publicaciones en este blog sobre Cobertura Universal de Salud

  1. ¿Es posible alcanzar la Cobertura Universal de Salud?
  2. Cobertura sanitaria universal en Panamá: ¿realidad o quimera?
  3. Salud de los hombres y cobertura universal de salud
  4. Resoluciones sobre Cobertura Universal de Salud: primer fruto de la Asamblea Mundial de la Salud
  5. Cobertura Sanitaria Universal para 2030: ¡buenas noticias para el mundo!
  6. Cobertura universal de salud en Panamá: ¿será que podremos alcanzarla?
  7. Cerrar la brecha en la cobertura universal de salud para las personas más pobres
  8. Participación social para la cobertura universal de salud
  9. Empoderamiento social y sistemas de salud resilientes para la Cobertura Universal de Salud
  10. Día de la Cobertura Universal de Salud 2022
  11. Hacia la Cobertura universal de salud: recomendaciones para construir sistemas de salud resilientes aprovechando las enseñanzas de la pandemia de COVID-19
  12. Cobertura Universal de Salud: sigue siendo una quimera
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