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La encrucijada de la educación en América Latina y el Caribe

Los invito a la lectura de la publicación de La CEPAL titulada La encrucijada de la educación en América Latina y el Caribe. Informe regional de monitoreo ODS4-Educación 2030 y comparto un brevísimo resumen de los desafíos que propone. Tiene gran relevancia para nosotros que somos uno de los países de la región que más tiempo mantuvimos nuestras escuelas cerradas durante la pandemia de COVID-19 y deberemos hacer un gran esfuerzo por recuperar el terreno perdido.

Publicado en 2022 por la UNESCO, UNICEF y la CEPAL, el documento realiza un balance de la implementación del ODS4-E2030 en América Latina y el Caribe en el ciclo 2015-2021, analizando logros e identificando los desafíos para el cumplimiento de las metas educativas en la región. El informe identifica las tendencias educativas del período, y destaca que, incluso antes de la pandemia de la COVID-19. el cumplimiento de las metas previstas para el 2030 no estaba asegurado, y mucho menos lo está en el presente tan difícil que atraviesa la región y el mundo. Concluye que, para lograr un avance significativo hacia el ODS4, es necesario encarar transformaciones profundas para modificar el rumbo de las políticas y de la asignación de recursos para la educación.

La encrucijada de la educación en América Latina y el Caribe

De acuerdo con los autores, “ la educación en América Latina y el Caribe enfrenta hoy un escenario complejo. La pandemia ha desatado en la región la mayor crisis educativa en cien años. Cerca de 170 millones de niños, niñas y adolescentes fueron afectados por una masiva suspensión de clases presenciales, que con el correr de los meses se convirtió en uno de los cierres escolares más largos del mundo. La crisis aún no termina y ya se perfilan profundos impactos en los aprendizajes, la exclusión educativa y el bienestar socioemocional de estudiantes y docentes”.

Breve resumen de los diez desafíos para enfrentar el estancamiento y la crisis

El objetivo de este informe es plantear con claridad los desafíos y las lecciones aprendidas de los caminos transitados por los países de América Latina y el Caribe, con el fin de garantizar el derecho a la educación. Este diagnóstico aporta una mirada actualizada sobre las luces y sombras de la educación en la región antes y durante la pandemia de la COVID-19. Buscar salidas a las encrucijadas de la educación requerirá de voluntad política, solvencia profesional y de diálogos que articulen los esfuerzos de múltiples actores y el uso de la evidencia comparada. Será clave combinar una mirada realista y transformadora a la vez. No es suficiente continuar en el mismo rumbo: son necesarios cambios profundos para alcanzar las metas en 2030.

  1. Potenciar la visión ampliada de la educación como derecho humano: el derecho a la educación supone también el derecho al conocimiento en su mayor amplitud, a la diversidad de experiencias de aprendizajes y a la conectividad tecnológica en educación, que abre las puertas a la diversidad de contextos y necesidades de las poblaciones específicas, reconociendo su historia, identidad y complejidad.
  2. Las políticas educativas son centrales y pueden hacer grandes diferencias, pero no bastan si no cuentan con una mirada más amplia del desarrollo económico con inclusión social.
  3. La mejora continua de la calidad de los aprendizajes, entendida en términos de oportunidades, procesos, participación y resultados de aprendizaje, debe partir de esta visión ampliada de la inclusión educativa.
  4. La visión curricular de la mayoría de los países de la región está mutando hacia enfoques de enseñanza, aprendizaje y evaluación articulados en torno a competencias para que los alumnos puedan asumir los desafíos del siglo XXI.
  5. La renovación de la enseñanza se encuentra en el corazón de la mejora de los aprendizajes.
  6. La mejora de la profesión docente es central para apuntalar y potenciar todas las acciones que han sido mencionadas.
  7. El aprendizaje a lo largo y ancho de toda la vida es una meta que implica reforzar los programas de formación de jóvenes y adultos para potenciar sus oportunidades de trabajo y crear bisagras virtuosas entre el conocimiento, los cambios societales disruptivos y la transformación de perfiles profesionales, ocupaciones y tareas, así como de oportunidades y espacios de trabajo y sus impactos en el mercado laboral.
  8. La preparación para el mundo del trabajo requiere integrar una mirada transformacional de la escuela secundaria en su conjunto incluyendo las sinergias entre educación secundaria y técnico profesional, así como de las oportunidades de la educación superior.
  9. La educación superior requiere replantear su visión y organización para dar un marco unitario de propósito y potenciar ofertas diversas que sean atractivas y relevantes para distintos sectores de la población, incluyendo la educación terciaria.
  10. Finalmente, todas estas acciones requerirán un incremento del financiamiento educativo y una mejor asignación de los recursos para lograr niveles más altos de eficiencia y equidad.

 

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