Hace diez años la Organización Internacional del Trabajo publicó el documento “Seguridad social para todos: Establecimiento de pisos de protección social y de sistemas integrales de seguridad social”. En el documento se expone la estrategia de seguridad social de la OIT, acordada por consenso por los gobiernos y las organizaciones de trabajadores y de empleadores de los 185 Estados Miembros de la OIT.
Comparto los mensajes clave del documento, complemento con una referencia a las recomendaciones que nos hiciera la OIT el año pasado, y los invito a la lectura completa de ambos documentos, así como a mis publicaciones previas sobre el tema de las pensiones.
Ya no tenemos la excusa de la supuesta falta de información. Es obligatorio convocar el suspendido diálogo social tripartito y avanzar. ¡Qué no nos falte la voluntad política!
Seguridad social para todos
Principales mensajes (hace 10 años)
En el contexto de un mundo sacudido por una crisis que ha estado marcada por una extraordinaria serie de incertidumbres políticas, medioambientales, económicas y fiscales, la Recomendación envía rotundos mensajes a quienes deciden y adoptan las políticas en todos los rincones del mundo. Los principales mensajes son los siguientes:
- La seguridad social es un derecho humano y a todas las personas, independientemente de dónde vivan, se les debería garantizar al menos un piso de protección social de base.
- La seguridad social es una necesidad social y económica para combatir la pobreza y la exclusión social y promover el desarrollo, la igualdad y la igualdad de oportunidades.
- Un piso de protección social es asequible económicamente y puede introducirse, completarse o mantenerse en todas partes, con arreglo a las circunstancias nacionales.
- Un piso de protección social debería consistir por lo menos en cuatro garantías básicas de seguridad social para todos los residentes y todos los niños: atención de salud esencial, y seguridad básica del ingreso en la niñez, durante la vida adulta y la vejez.
- Todas las sociedades deberían desarrollar también estrategias para elevar sus niveles de seguridad social, con arreglo a las orientaciones de las normas de seguridad social de la OIT, a medida que sus economías maduran y que el espacio fiscal se amplía.
Resumen de recomendaciones del informe actuarial de la OIT
Comparto con ustedes un breve extracto de las recomendaciones del informe actuarial de la OIT titulado “Valuación actuarial del sistema panameño de pensiones al 31 de diciembre de 2019” y los invito a la lectura completa del documento.
Aunque tiene tres años de desfase, el informe ratifica lo que ya sabíamos. A partir de la definición clara de tres aspectos relevantes de contexto nacional, describe con bastante claridad los problemas de los dos regímenes de pensiones que tenemos, y ofrece, sin entrar en mayores detalles una serie de recomendaciones que me parecen todas necesarias, dejando el terreno abonado para que los panameños decidamos juntos, cuál es el sistema de pensiones que queremos. Garantizando cobertura adecuada, suficiencia de las prestaciones y sostenibilidad financiera.
Resumen de recomendaciones
- En el marco del diálogo social tripartito, se recomienda avanzar en la discusión y definición de las opciones de reforma del sistema de pensiones, tomando en cuenta los cambios necesarios para su adaptación permanente e indispensable ante un entorno complejo y cambiante. Las reformas deberán de tener como norte los principios de la seguridad social, entre otros los de universalidad, solidaridad, suficiencia de las prestaciones y la sostenibilidad financiera y económica.
- La Oficina de la OIT está a disposición de los interlocutores sociales para informar sobre experiencias y buenas prácticas internacionales, discutir las implicaciones de los diferentes escenarios de reforma, y cuantificarlos haciendo uso del modelo actuarial que la Organización ha desarrollado para Panamá y que es la base de este informe.
- Los escenarios de reforma idealmente deben contemplar una visión que apunte hacia la garantía de la sostenibilidad del sistema panameño de pensiones en todo su conjunto (SEBD y SM), incluyendo una efectiva acción protectora de la población asegurada, y la consideración de un entorno para su funcionamiento cambiante y retador.
- Someter al diálogo social tripartito la discusión para avanzar hacia la ratificación del Convenio núm. 102 de la OIT, una norma internacional que proporciona puntos de referencia para garantizar sistemas de seguridad social eficaces, equitativos y sostenibles, anclados en una base de derechos y obligaciones claramente definida.
- Diseñar y poner en marcha, por parte de la CSS y otras instituciones del sector, una estrategia de extensión de la cobertura, sobre la base de estudios y evaluaciones técnicas. La estrategia debe contar al menos con estrategias y acciones puntuales para cubrir los principales grupos de difícil cobertura, incluyendo el trabajo independiente; reformas administrativas y reglamentarias para facilitar la afiliación, la recaudación, la inspección y la cobranza coactiva; evaluaciones de la normativa actual asociada con el control contributivo; transformaciones en el uso de las tecnologías de información y comunicación, entre otros aspectos. Esta estrategia debe, idealmente, contar con un plan de acción de corto y mediano plazo y con suficiente presupuesto institucional, por su carácter de inversión indispensable, para su efectiva implementación.
- Dotar a la CSS de un plan de modernización para la gestión del Régimen de IVM con una visión de largo plazo, con financiamiento para su implementación. El plan debe incluir procesos y actividades críticas, tales como la revisión y adecuación de la estructura orgánica y funcional del Régimen; el fortalecimiento de los sistemas de información, incluyendo la conclusión de los procesos de integración; la mejora de los sistemas contables atendiendo las recomendaciones emitidas por la Contraloría General de la República en sus procesos de auditoría y otras identificadas a lo nivel interno de la CSS; la mejora en el abordaje de las inversiones del Régimen, siguiendo las mejores prácticas internacionales; la automatización de los procesos de captura y validación de la información de afiliados y cotizantes activos; el fortalecimiento y automatización de los procesos de asignación de los ingresos por ramo de seguro o riesgo para cubrir las prestaciones; la actualización y depuración de la base de datos de cuenta individual; el desarrollo de nuevas tecnologías para mejorar la vinculación entre la CSS y las personas aseguradas; la formación de recurso humano especializado permanente en la gestión del Régimen; y una estrategia de comunicación y educación en seguridad social, entre otras.