
En ese contexto los invito a la lectura del informe del secretario de la ONU, comparto un breve resumen de la mortalidad por las principales ENT en nuestro país y en las Américas, así como la necesidad de aplicar las mejores prácticas (personales y desde los servicios de salud) para la prevención y control de las enfermedades no transmisibles.
Debe ser una prioridad del gobierno, empresarios, y sociedad, pues como sabemos las enfermedades no transmisibles constituyen la principal causa de muerte en nuestro país, y están directamente relacionadas con factores de riesgo conocidos. Debe ser una prioridad del gobierno, empresarios, sociedad, por lo que es hora de ponernos todos a trabajar en serio para promover y proteger la salud y la vida, evitando los factores de riesgo asociados a estas enfermedades y, prevenirlas, detectarlas y tratarlas oportunamente.
Prevención y control de las ENT: una deuda pendiente
De acuerdo con el reciente informe del Secretario General de la ONU, cuya lectura completa recomiendo, “las enfermedades no transmisibles, entre las que se cuentan las afecciones de salud mental, son responsables de la mayor parte de las muertes anuales en todo el mundo y también las principales causas de morbilidad, incluida la discapacidad. Una decisión fundamental para impulsar la acción mundial en este sentido fue que se las incluyera explícitamente en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, junto con el compromiso de reducir en un tercio la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles mediante su prevención y tratamiento, y promover la salud mental y el bienestar para 2030 (meta 3.4 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible). Sin embargo, pasado ya el ecuador del trayecto hacia 2030, el mundo no está en condiciones de alcanzar la meta 3.4 de los Objetivos. Aunque algunos países están en condiciones de lograr las metas nacionales, el progreso global sigue siendo insuficiente”.
Este informe ofrece un análisis del informe del Secretario General basado en las prioridades políticas de la ENT para la cuarta Reunión de Alto Nivel de la Asamblea General sobre la prevención y el control de las enfermedades no transmisibles y la promoción de la salud mental y el bienestar (HLM4). El informe también proporciona recursos para que los activistas se unan a la campaña “Tiempo de Liderar” en el período previo a la HLM4, que se celebrará el 25 de septiembre de 2025 en Nueva York.
Resumen de situación de las enfermedades no transmisibles en Panamá
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos durante el 2023 el 56% de las defunciones ocurridas en el territorio nacional (12,135) fueron consecuencia de las principales enfermedades no transmisibles (enfermedades del aparato circulatorio, diabetes mellitus y tumores malignos). Estas enfermedades no transmisibles están relacionadas en forma directa con estilos y condiciones de vida asociados a factores de riesgo para la salud y la vida, y con la insuficiente capacidad de nuestro sistema público de salud para la promoción de la salud, prevención y tratamiento oportuno y apropiado. Y no perdamos de vista el impacto socioeconómico de las ENT, pues es sabido que éstas constituyen una importante amenaza para el crecimiento económico y el desarrollo potencial de las naciones, pues son responsables de gastos de bolsillo significativos en los servicios de salud, y contribuyen al empobrecimiento de las familias.
Como señalé en mi publicación previa sobre las enfermedades no transmisibles en Panamá, citando el documento de la OPS “para reducir la aparición de nuevos casos de enfermedades no transmisibles y mitigar las consecuencias de las enfermedades existentes, se necesita que intervengan diferentes sectores. Los sistemas de salud y protección social son directamente responsables del tratamiento de las personas que padecen enfermedades no transmisibles. Sin embargo, los principales factores de riesgo de las enfermedades no transmisibles se ven afectados por los determinantes sociales y múltiples factores interrelacionados que van más allá del sector de la salud. Por lo tanto, es necesario que todos los sectores se impliquen en el abordaje de las causas y las consecuencias de las enfermedades no transmisibles. Tanto los integrantes de los sectores público y privado como las organizaciones de la sociedad civil tienen un papel en este proceso”. No dejen de leer el documento completo.
Resumen de situación de las enfermedades no transmisibles en la región de las Américas
- Las enfermedades no transmisibles causan 3.9 millones de muertes cada año en las Américas representando 3/4 partes del total de defunciones registradas en la Región.
- 200 millones de personas en las américas padecen estas enfermedades, lo que repercute en su vida, su bienestar y en su capacidad para trabajar. A su vez, esta situación plantea importantes retos para la economía, el sistema de salud y otros sectores de la sociedad.
- Cuatro enfermedades no transmisibles se distinguen como responsables de la mayor carga de morbilidad: las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, el cáncer y las enfermedades respiratorias crónicas.
- Las enfermedades no transmisibles se pueden prevenir si sus principales factores de riesgo se abordan. Esos factores de riesgo son: el tabaquismo, la dieta poco saludable, el sedentarismo y el consumo nocivo de alcohol.
- Si se eliminaran estos factores de riesgo, que son modificables, se calcula que se podrían prevenir el 80% de las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y los casos de diabetes de tipo 2, así como más del 40% de los casos de cáncer.
- Las causas de las enfermedades no transmisibles y sus factores de riesgo están determinadas, en gran medida, por el entorno social físico y económico. Por esa razón, estas enfermedades requieren que todos los sectores, y no sólo el sistema de salud, intervengan sobre los determinantes sociales de la salud. Sectores como la educación, la agricultura y la ganadería, el comercio, la planificación urbana y el transporte, entre otros, desempeñan una función muy importante en establecer entornos y alternativas saludables.
Mejores prácticas para la prevención y control de las enfermedades no transmisibles
La prevención y control de las enfermedades no transmisibles (ENT) requiere intervenciones dirigidas a las 4 principales enfermedades y sus factores de riesgo. A continuación se presenta un resumen de intervenciones costo eficaces informadas en la evidencia propuestas por la OMS, con la finalidad de orientar la toma de decisiones.
Intervenciones para promover hábitos saludables
Reducir el consumo de tabaco
- Aumentar los impuestos y precios a los productos de tabaco
- Utilizar el empaquetado neutro/normalizado y/o advertencias sanitarias gráficas grandes en todos los paquetes de tabaco
- Aplicar una prohibición total de la publicidad, la promoción y el patrocinio del tabaco
- Eliminar la exposición al humo de tabaco ajeno en todos los lugares de trabajo interiores, lugares públicos y transportes públicos
- Advertir sobre los daños causados por el consumo y exposición al humo de tabaco por medio de campañas a gran escala
- Ofrecer programas para ayudar a abandonar el consumo del tabaco
Reducir el uso nocivo de alcohol
- Aumentar los impuestos a las bebidas alcohólicas
- Aplicar prohibición o restricción integral a la publicidad del alcohol
- Aplicar restricciones a la disponibilidad física de alcohol al por menor
- Promulgar y aplicar legislación sobre conducción bajo los efectos del alcohol y de límites de concentración de alcohol en la sangre
- Ofrecer intervenciones psicosociales a las personas que consumen alcohol de forma peligrosa y nociva
Promover dieta saludable
- Reducir la ingesta de sal: reformulando productos alimenticios y fijando niveles objetivo de contenido de sal en alimentos y comidas, ofreciendo opciones con menos contenido de sodio en instituciones públicas, promoviendo un cambio de comportamiento mediante campañas en los medios de comunicación, incluyendo etiquetado en la parte frontal de los envases
- Eliminar las grasas trans industriales en la cadena alimentaria
- Aumentar los impuestos en las bebidas azucaradas para reducir el consumo de azúcar
Promover actividad física
- Promover la actividad física a través de campañas en los medios de comunicación y otros programas comunitarios educativos, medioambientales y motivacionales
- Proporcionar asesoramiento en materia de actividad física y derivación de pacientes en el marco de los servicios básicos de atención primaria
Intervenciones desde la red de servicios de salud
Diabetes mellitus
- Ofrecer control de la glucemia para personas con diabetes
- Proporcionar atención podológica preventiva para las personas con diabetes
- Realizar pruebas de detección de la retinopatía diabética para los pacientes con diabetes y fotocoagulación con láser para evitar la ceguera
Enfermedades cardiovasculares
- Ofrecer tratamiento farmacológico y asesoramiento para aquellas personas con alto riesgo de sufrir un ataque cardíaco o cerebral
- Tratar los nuevos casos de infartos agudos de miocardio con ácido acetilsalicílico y clopidogrel, trombólisis, o con intervenciones coronarias percutáneas primarias
- Ofrecer tratamiento trombolítico intravenoso del accidente cerebrovascular isquémico agudo
- Prevenir la fiebre reumática y las cardiopatías reumáticas aumentando la cobertura del tratamiento apropiado de la faringitis estreptocócica en el nivel de la atención primaria, y desarrollando un registro de pacientes que reciben periódicamente profilaxis con penicilina
Cáncer
- Prevenir el cáncer cervicouterino:
- Vacunando a las niñas de 9 a 13 años contra el virus del papiloma humano
- Realizando pruebas de cribado a las mujeres de entre 30 y 49 años por medio de citología cervicouterina, prueba de detección del virus del papiloma humano o la inspección visual tras la aplicación del ácido acético
- Proporcionar cribado con mamografía para mujeres de 50 a 69 años con diagnóstico oportuno y tratamiento del cáncer de mama
- Proporcionar tratamiento quirúrgico, quimioterapia y radioterapia para el tratamiento contra el cáncer
- Ofrecer asistencia domiciliaria y hospitalaria para los cuidados paliativos
Enfermedades respiratorias crónicas
- Proporcionar salbutamol inhalado para el alivio de los síntomas en enfermos de asma, y para enfermos con enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- Ofrecer tratamiento del asma con dosis bajas de beclometasona inhalada y agonistas betaadrenérgicos de acción breve
Una reflexión final
Para terminar, recalco la importancia del informe de la Comisión Independiente de Alto Nivel de la OMS sobre Enfermedades No Transmisibles titulado “Es hora de actuar”. El documento señala que no hay excusa para la inacción, pues, “a pesar de disponer de soluciones basadas en pruebas científicas, muchos países no están cumpliendo con sus compromisos políticos para alcanzar las metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, con su promesa de no dejar a nadie atrás. En particular cumplir en el plazo fijado su promesa de reducir en una tercera parte la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles mediante la prevención y el tratamiento, y promover la salud mental y el bienestar”. Afirman los comisionados que “se han formulado numerosas políticas, pero las estructuras y los recursos para aplicarlas son escasos. El reto no consiste solamente en lograr el apoyo político, sino también en garantizar la aplicación, bien sea mediante la formulación de legislación, normas y criterios, o a través de la inversión”. Subrayan la necesidad de seguir abogando por dar mayor prioridad a las enfermedades no transmisibles y la salud mental.
¡Es hora de actuar. Avancemos!
