
El uso irracional de medicamentos es un problema complejo y generalizado que afecta tanto a países desarrollados como a aquellos en vías de desarrollo, y Panamá no es la excepción.
En ese sentido, motivado por aportes de mi apreciado y respetado amigo, el Dr. José Villacís, prestigioso médico ecuatoriano; le dedico esta entrada a compartir información importante _extraída de revisiones sistemáticas de la OMS, publicaciones científicas en revistas médicas, organismos gubernamentales y agencias de salud pública_ sobre el uso irracional de medicamentos.
Un grave problema de salud pública que, no solo genera riesgos para la salud de los individuos, sino que también incrementa la resistencia a los medicamentos, especialmente en el caso de los antibióticos, y supone un gasto innecesario tanto para los sistemas de salud como para los pacientes.
Uso irracional de medicamentos: ¿de qué estamos hablando?
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud se estima que, más del 50% de todos los medicamentos en el mundo se prescriben, dispensan o venden de forma inadecuada. Además, la OMS también señala que aproximadamente la mitad de los pacientes no toman sus medicamentos de manera correcta, lo que agrava el problema del uso irracional de medicamentos. Este problema incluye, por lo menos, los siguientes aspectos:
La prescripción de medicamentos innecesarios. Por ejemplo, los antibióticos se recetan en aproximadamente el 60% de los casos para infecciones respiratorias agudas, a pesar de que la mayoría de estas infecciones son virales y no requieren antibióticos; además las dosis incorrectas pueden ser tanto subterapéuticas, que no alcanzan el efecto deseado, como supraterapéuticas, que aumentan el riesgo de efectos secundarios, y ; la falta de seguimiento adecuado en los tratamientos y la venta de medicamentos sin receta médica, entre otros. La automedicación y la influencia de la publicidad también contribuyen significativamente a esta situación.
La dispensación Inadecuada: en muchos casos, los medicamentos se dispensan sin la información necesaria para su uso correcto, como instrucciones sobre la dosificación o advertencias sobre efectos secundarios. Los errores en la dispensación: Los errores durante la dispensación, como entregar el medicamento equivocado o no verificar posibles interacciones, contribuyen significativamente al uso irracional.
La automedicación con antibióticos es especialmente preocupante. En algunos estudios, hasta el 70% de los pacientes han admitido usar antibióticos sin receta previa, así como; el acceso a medicamentos de venta libre: los analgésicos, antihistamínicos y otros medicamentos de venta libre también se usan frecuentemente de manera irracional, ya sea en dosis incorrectas o por periodos prolongados sin supervisión médica.
No menos importante es la comercialización inadecuada, que incluye: publicidad engañosa que afecta al consumidor al promover medicamentos sin destacar adecuadamente los riesgos o la necesidad de un diagnóstico médico, puede llevar al uso irracional. En algunos países, los estudios han mostrado que hasta el 75% de las publicidades de medicamentos pueden ser engañosas o inexactas. Así mismo las prácticas de marketing agresivas por parte de las compañías farmacéuticas, que promueven productos de manera no ética, también contribuyen al uso inapropiado de medicamentos.
Impacto del uso Irracional de medicamentos
Comencemos por la resistencia antimicrobiana: el uso inadecuado de antibióticos es una de las principales causas de la resistencia antimicrobiana, un problema que la OMS clasifica como una de las mayores amenazas para la salud global. Se estima que cada año se producen al menos 700,000 muertes a nivel mundial debido a infecciones resistentes a los medicamentos.
Igual importancia tienen los efectos adversos relacionados con el uso inadecuado de medicamentos pues representan una importante carga para los sistemas de salud. Se calcula que en algunos países, hasta el 5% de todas las hospitalizaciones están relacionadas con reacciones adversas a medicamentos.
Así mismo, el uso irracional de medicamentos incrementa los costos de atención médica, tanto por el uso innecesario de medicamentos como por el tratamiento de las complicaciones asociadas. La OMS estima que estos costos adicionales pueden llegar a representar entre el 10% y el 20% de los presupuestos de salud en algunos países.
Finalmente, el uso irracional de ciertos medicamentos, como opioides o benzodiacepinas, puede llevar a dependencia y abuso.
¿Cómo evitar el uso irracional de medicamentos?
Evitar el uso irracional de medicamentos requiere un enfoque multidimensional que involucre a pacientes, profesionales de la salud, gobiernos y la sociedad en general. Veamos algunas estrategias clave que recomiendan los expertos para lograrlo:
Educación y Concientización
- Educación del paciente: Es fundamental educar a los pacientes sobre los riesgos de la automedicación y la importancia de seguir las indicaciones médicas. Esto incluye entender la dosis correcta, la duración del tratamiento y los posibles efectos secundarios.
- Campañas de salud pública: Los gobiernos y organizaciones de salud pueden realizar campañas para informar a la población sobre el uso adecuado de los medicamentos, especialmente los antibióticos, y el peligro de la resistencia microbiana.
Prescripción Racional por Parte de los Profesionales de la Salud
- Capacitación continua: Asegurar que los médicos, farmacéuticos y otros profesionales de la salud reciban formación continua en farmacología y estén actualizados sobre las guías de tratamiento basadas en evidencia.
- Uso de guías clínicas: Fomentar el uso de protocolos y guías clínicas basadas en la evidencia científica para asegurar que los medicamentos se prescriban adecuadamente.
- Supervisión de las recetas: Implementar sistemas de revisión y supervisión de las prescripciones médicas para detectar patrones de uso irracional y corregirlos.
Regulación y Control
- Control de ventas: Establecer y hacer cumplir leyes que regulen la venta de medicamentos, especialmente los que requieren receta médica. Esto incluye la prohibición de la venta libre de antibióticos y otros medicamentos controlados.
- Políticas de restricción de publicidad: Restringir la publicidad directa al consumidor de medicamentos, especialmente aquellos que requieren prescripción, para evitar que las personas se automediquen basándose en anuncios comerciales.
- Implementación de sistemas de farmacovigilancia: Monitorear el uso de medicamentos y reportar cualquier uso indebido, reacciones adversas o problemas relacionados con medicamentos.
Promoción del Uso de Medicamentos Genéricos
- Acceso a medicamentos esenciales: Facilitar el acceso a medicamentos esenciales y genéricos que sean seguros, efectivos y asequibles, lo que puede ayudar a reducir la dependencia de medicamentos innecesarios o costosos.
Participación del Farmacéutico
- Rol activo del farmacéutico: Los farmacéuticos pueden desempeñar un papel clave en la educación de los pacientes y en la vigilancia del uso correcto de los medicamentos, asegurándose de que las prescripciones sean apropiadas y de que los pacientes comprendan cómo tomar sus medicamentos.
- Revisión de medicamentos: Ofrecer servicios de revisión de medicamentos en las farmacias para ayudar a los pacientes a entender sus tratamientos y prevenir el uso indebido de múltiples medicamentos.
Mejora en la Comunicación Médico-Paciente
- Consulta efectiva: Los médicos deben dedicar tiempo a explicar a los pacientes por qué un medicamento es necesario o no, cómo debe tomarse y los riesgos asociados con su uso inadecuado.
- Empoderamiento del paciente: Fomentar que los pacientes hagan preguntas y participen activamente en las decisiones sobre su tratamiento.
Promoción de Alternativas Terapéuticas
- Terapias no farmacológicas: Fomentar el uso de alternativas no farmacológicas cuando sea posible, como cambios en el estilo de vida, fisioterapia, o terapia psicológica, para tratar ciertas condiciones en lugar de recurrir inmediatamente a medicamentos.
- Seguimiento y ajuste de tratamiento: Realizar un seguimiento continuo de los pacientes para ajustar o descontinuar medicamentos cuando ya no sean necesarios, evitando así el uso prolongado sin justificación.
Involucrar a la Comunidad
- Grupos de apoyo: Crear grupos comunitarios que promuevan el uso racional de medicamentos, donde los miembros puedan compartir experiencias y aprender sobre el uso seguro de los medicamentos.
- Colaboración con líderes comunitarios: Trabajar con líderes locales, religiosos o comunitarios para difundir mensajes sobre el uso racional de medicamentos.
Monitoreo y Evaluación
- Evaluación de impacto: Implementar sistemas para monitorear y evaluar continuamente las estrategias de promoción del uso racional de medicamentos, ajustándolas según sea necesario para mejorar su efectividad.
- Uso de tecnologías de la información: Utilizar herramientas digitales para rastrear el uso de medicamentos, alertar a los médicos sobre posibles interacciones o prescripciones duplicadas, y educar a los pacientes a través de aplicaciones móviles o plataformas en línea.
Cooperación Internacional
- Compartir buenas prácticas: Los países pueden cooperar para compartir políticas exitosas, investigaciones y experiencias que promuevan el uso racional de medicamentos.
- Programas globales de salud: Participar en programas y acuerdos internacionales que promuevan el uso racional de medicamentos, como los promovidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
- Implementar estas estrategias de manera coordinada puede reducir significativamente el uso irracional de medicamentos y contribuir a mejorar la salud pública a nivel global.
Iniciativas Globales para Combatir el Uso Irracional de medicamentos
Estrategias de la OMS: La OMS ha lanzado diversas iniciativas para promover el uso racional de medicamentos, incluyendo la promoción de guías de tratamiento basadas en evidencia, la mejora de la educación médica y la regulación del mercado farmacéutico.
Colaboración internacional: Países y organizaciones internacionales están trabajando juntos para desarrollar políticas y programas que aborden el uso irracional de medicamentos, incluyendo el control de la resistencia antimicrobiana y la mejora de los sistemas de farmacovigilancia.
La combinación de estos esfuerzos puede ayudar a reducir el porcentaje de medicamentos que se prescriben, dispensan o comercializan de forma inadecuada y a mejorar los resultados de salud a nivel global. Ver más sobre el acceso a medicamentos aquí.
