Comparto resumen de traducción libre del Episodio 100 de Science in 5 de la OMS sobre la violencia contra la niñez titulado “¿Cómo puedes proteger a los niños de la violencia?” y complemento con un resumen de las conclusiones del estudio de UNICEF titulado “Análisis de Situación de violencias contra niños, niñas y adolescentes en Panamá”.

Es un asunto de suma importancia para nosotros pues, como verán más adelante, la violencia contra la niñez es un problema grave en Panamá. El cual tiene graves consecuencias para los niños, tanto a corto como a largo plazo, afectando su bienestar físico, emocional y psicológico. Además, la violencia contra la niñez perpetúa un ciclo intergeneracional de violencia y puede tener un impacto negativo en la sociedad en su conjunto.

¿Cómo podemos proteger a los niños de la violencia?

Para dar respuesta a esta pregunta, Vismita Gupta-Smith de la OMS entrevista a Sabine Rakotomalala, experta de la OMS. Conozcamos sus respuestas.

Una breve mirada a la situación mundial

“Uno de cada dos niños de 2 a 17 años ha sufrido violencia sexual o violencia física o violencia emocional en el último año. Eso es 1 de cada 2 niños en el mundo. También sabemos que 5 de cada cinco niñas son abusadas sexualmente antes de los 18 años y 1 de cada 13 niños son abusados sexualmente antes de los 18 años”.

“Estos números son impactantes e inaceptables. Los impactos físicos, como muertes y lesiones, son terribles. Sin embargo, también hay consecuencias para toda la vida que vienen con la violencia en la infancia. Sabemos que los niños que han sufrido violencia sufrirán más trastornos de salud mental como depresión, ansiedad, pensamientos suicidas. Estos niños también corren un mayor riesgo de involucrarse en comportamientos de riesgo como fumar, consumir alcohol, consumir drogas y tener relaciones sexuales sin protección”.

“Estos, a su vez, conducen a enfermedades no transmisibles como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. Y también sabemos que los niños que sufrieron violencia en la infancia tienen más probabilidades de convertirse en perpetradores de violencia más adelante en la vida”.

Violencia en línea

“La violencia en línea es un problema real. Y cuando analizamos la violencia en línea, en realidad estamos analizando el acoso cibernético y la violencia sexual en línea. Hay una serie de iniciativas importantes en la actualidad que recopilan datos sobre este problema global en línea. Sin embargo, hay dos mitos importantes que deben aclararse. El primero es que la violencia es cometida por extraños, también conocida como “peligro de extraños”. De hecho, sabemos que la mayor parte del ciberacoso en línea ocurre por parte de compañeros, conocidos, familiares”.

“Estas son las situaciones de las que tenemos que estar atentos. El segundo mito que debe aclararse es que la violencia en línea es un problema en sí mismo. De hecho, en la mayoría de los casos, está relacionado con la violencia cara a cara que ocurre en la vida real. Entonces, por ejemplo, el acoso cibernético en tres cuartas partes de los casos también está relacionado con el acoso que ocurre en el patio de recreo o en la comunidad. O los niños que envían mensajes sexuales a menudo tienen una relación abusiva con sus parejas íntimas”.

¿Cómo podemos reconocer los signos de esta violencia contra la niñez?

“Los signos comunes que pueden indicar abuso infantil incluyen, por ejemplo, lesiones, fracturas o quemaduras inexplicables. El comportamiento de los niños que cambia, por ejemplo, volviéndose muy retraídos y aislados socialmente o volviéndose muy agresivos y violentos. También vemos niños que cambian repentinamente su higiene. Por lo que la mala higiene, los niños que tienen una disminución en el rendimiento académico. Y también, por supuesto, niños pequeños menores de 12 años que de repente son portadores de enfermedades de transmisión sexual”.

“Es importante tener en cuenta que estos signos por sí solos no son signos definitivos de abuso infantil. Sin embargo, si tiene estas inquietudes, informe a los trabajadores de la salud, los trabajadores sociales o los trabajadores de su escuela”.

¿cómo los maestros, los vecinos y los adultos de la comunidad pueden prevenir la violencia contra la niñez?

“Para los padres, cuidadores, maestros y, en realidad, cualquier persona que esté en contacto con niños, protegerlos debe ser una prioridad máxima. En ese sentido hay cuatro consejos clave basados en evidencia: el primero es la comunicación abierta con sus hijos. Si puede establecer esa comunicación abierta el día que su hijo sufre algo, es más probable que acuda a usted; el segundo es establecer reglas claras. Esto incluye, por ejemplo, toques de queda, estructurar su día, pero lo que es más importante, saber siempre dónde está su hijo en términos de reglas; en tercer lugar, enseñar a sus hijos sobre el consentimiento y la seguridad personal del cuerpo. Esto es importante en todas las edades: 4 años, 8 años, 10 años, 18 años; y por último, participar activamente en la vida de su hijo. Nuevamente, si usted está involucrado en la vida de su hijo, sabrá cuándo él o ella está cambiando su comportamiento y posiblemente esté mostrando signos de problemas”.

Más sobre violencia contra la niñez en la Nota Descriptiva de la OMS

Violencia contra la niñez en Panamá

Comparto resumen de las conclusiones del estudio de UNICEF titulado “Análisis de Situación de violencias contra niños, niñas y adolescentes en Panamá” y los invito a su lectura completa, es especial las recomendaciones que ofrece.

• La violencia en todas sus formas afecta a niños, niñas y adolescentes en todos los entornos en los que crecen y se desarrollan.
• En muchos casos, la responsabilidad de disciplinar a los hijos recae en las madres, lo que lleva a la aplicación de diferentes formas de disciplina violenta.
• El barrio es identificado como el lugar con mayor cantidad de violencia, especialmente relacionada con pandillas y violencia armada, lo que afecta directa o indirectamente a más de la mitad de los participantes, causando lesiones o muerte en miembros de la familia.
• Las pandillas representan la mayor amenaza para la integridad de los niños y adolescentes, ya sea por su alta posibilidad de involucrarse directamente o convertirse en víctimas.
• Las desigualdades sociales y la falta de acceso a la educación, trabajo y salud generan diferentes tipos de violencia, especialmente relacionados con pandillas, drogas y crimen organizado.
• El uso de la violencia como forma de disciplina en la familia se ha normalizado, lo que perpetúa su reproducción intergeneracional.
• La respuesta del Estado para contener o erradicar la violencia es insuficiente debido a la pobreza multidimensional, la desigualdad y la inequidad, que son causas estructurales de la violencia.
• La pobreza afecta principalmente a los niños y adolescentes, especialmente en áreas rurales, y limita su acceso a múltiples aspectos de desarrollo.
• Los estereotipos de género, las relaciones asimétricas, la disciplina violenta, los embarazos precoces y el trabajo infantil son barreras que impiden el reconocimiento de los derechos de los niños y adolescentes.
• Los grupos de poder económico, político y religioso obstaculizan el cumplimiento de los derechos de los niños y adolescentes. Las intervenciones para prevenir y atender la violencia contra los niños y adolescentes no son suficientes en términos de cantidad y cobertura.
• La falta de articulación de los sistemas de información y la ausencia de evaluaciones periódicas dificultan la comprensión de la calidad, eficacia y resultados de estas intervenciones.