El uso inadecuado de antibióticos por los panameños, quedó claramente evidenciado en el excelente artículo que publicó ayer La Prensa, bajo el título “Panameños desconocen uso real de antibióticos: estudio del Gorgas”, en el cual se hace referencia al estudio “Encuesta de Conocimientos y Prácticas de la Población, relacionados al uso responsable de antibióticos”, que fue desarrollado por un equipo de investigadores del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES), y en el que participaron mil 264 personas mayores de edad de 4 áreas del país: Panamá (área metropolitana), distrito de San Miguelito, David (Chiriquí) y Santiago (Veraguas).
En ese preocupante contexto, consideré necesario compartir con ustedes las ideas centrales de mis publicaciones sobre el tema de la resistencia a los antibióticos, complementado con un resumen del excelente artículo de La Prensa.
Ideas centrales sobre el uso inadecuado de antibióticos, que nos pone a todos en riesgo
De acuerdo con Organización Mundial de la Salud; la resistencia a los antibióticos es hoy una de las mayores amenazas para la salud mundial, la seguridad alimentaria y el desarrollo. Puede afectar a cualquier persona, sea cual sea su edad o el país en el que viva. Cada vez es mayor el número de infecciones —por ejemplo, neumonía, tuberculosis y gonorrea— cuyo tratamiento se vuelve más difícil debido a la pérdida de eficacia de estos medicamentos. La resistencia prolonga las estancias hospitalarias, incrementa los costos de la atención sanitaria y la carga económica para las familias y la sociedad. Esta resistencia pone en riesgo los logros de la medicina moderna. Si no disponemos de antibióticos eficaces para prevenir y tratar las infecciones, los trasplantes de órganos, la quimioterapia y las intervenciones quirúrgicas se volverán más peligrosas.
Como señalé previamente, la era de los antibióticos puede acabarse, y el cambio no puede esperar. Así lo sugiere y destaca el lema de la Semana Mundial de Concientización sobre el Uso de los Antibióticos 2018 cuando nos informa que nuestro tiempo se está acabando y subraya que el uso inadecuado de antibióticos nos pone a todos en riesgo.
Por dos años consecutivos, la Organización Panamericana de la Salud ha hecho un llamado para que evitemos la resistencia a los antibióticos, subrayando que “es necesario que se cambie urgentemente la forma de prescribirlos y utilizarlos. Aunque se desarrollen nuevos medicamentos, si no se modifican los comportamientos actuales, la resistencia a éstos seguirá representando una grave amenaza”.
Para evitar el uso inadecuado de antibióticos, la OPS subrayó durante la Semana Mundial de Concientización sobre el Uso de Antibióticos 2017, que solo debe tomar antibióticos si han sido recetados por un profesional de salud. Mediante el uso responsable de antibióticos usted y su familia no solo obtendrán el mejor tratamiento, sino que también contribuirán a reducir la amenaza de la resistencia a los antimicrobianos. Es evidente, como lo demuestra la investigación del ICGES.
Mitos y realidades sobre el uso de antibióticos
Resumen del artículo “Panameños desconocen uso real de antibióticos”
- El artículo subraya de entrada que “un 76% de mil 264 personas encuestadas en 4 áreas del país respondió erróneamente para qué se utilizan los antibióticos. También se demostró que todavía se venden antibióticos sin receta”.
- A continuación, reflexiona sobre el uso inadecuado de antibióticos, poniendo como ejemplo la “Amoxicilina”, “como el primer nombre de un antibiótico que a cualquier persona le viene a la mente cuando piensa en estos fármacos que son utilizados para combatir infecciones”, pero, al mismo tiempo, es muy probable que desconozca para qué sirve este derivado de la penicilina y aun así acuda a las farmacias a comprarlo sin la correspondiente prescripción médica, un hecho que favorece que las bacterias desarrollen resistencia a ese antibiótico y que, a futuro, sea necesario utilizar uno más potente o de más amplio espectro que, además, será más costoso”.
- El desconocimiento de los panameños sobre lo anterior fue confirmado a través del estudio llevado a cabo por el ICGES. “Del total de encuestados, 76% (960 personas) desconocía para qué sirve un antibiótico; mientras que el 24% (304) dijo que los antibióticos son útiles para combatir infecciones causadas por bacterias. Al analizar el porcentaje de personas que desconocía el uso real de los antibióticos, 30% respondió que sirve para combatir infecciones causadas por todos los microbios; 26% dijo que, para controlar las infecciones causadas por bacterias, hongos y parásitos, y 20%, que sirven para infecciones causadas por virus como la gripe común”
- La investigación también mostró que a pesar de que la Ley 1 de 2001, sobre medicamentos y otros productos para la salud humana, exige la presentación de receta médica para la venta de antibióticos, “esta no se cumple a cabalidad, pues el 28% de los encuestados indicó haberlos comprado sin receta. No obstante, según el estudio, 72% de las personas encuestadas a la salida de alguna de las 130 farmacias en las que se aplicaron las encuestas manifestó haber obtenido antibióticos con la presentación de la receta médica. Dentro de este grupo, 11% compró por recomendación de otra persona; 6% por recomendación en la farmacia; 5% no recuerda; 3% por criterio propio, y 3% no especificó cómo”
Conclusiones
- Evitemos el uso inadecuado de antibióticos
- La resistencia a los antibióticos es hoy una de las mayores amenazas para la salud mundial, la seguridad alimentaria y el desarrollo.
- Pida consejo a un profesional de salud antes de tomar antibióticos.
- Solo debe tomar antibióticos si han sido recetados por un profesional de salud.
- Mediante el uso responsable de antibióticos usted y su familia no solo obtendrán el mejor tratamiento, sino que también contribuirán a reducir la amenaza de la resistencia a los antibióticos.
Sin duda alguna. Un desastre inminente. Ausencia de alfabetizacion sanitaria. Seguimos en esta desigual lucha.
En efecto!
Ciertamente, la resistencia a los antimicrobianos -RAM- debido a su uso excesivo e indebido podría malograr, a corto plazo, los avances de la salud mundial.
Se conoce que antibióticos como el cloranfenicol se usanampliamente para alargar la vida de productos de camaroneras y pesca marina que se transportan al interior. Las tetraciclinas son usadas en la fumigación de cítricos. En el campo veterinario la resistencia se desarrolla con mayor rapidez en sistemas de producción avícola, vacuna y porcina intensivas.
El desarrollo de la RAM dificultará progresivamente la capacidad de tratamiento para infecciones comunes.
Con ayuda de la FAO se han establecido las directrices sobre inocuidad alimentaria del Codex Alimentarius, con el enfoque “One-Health” que vincula a humanos, animales y ambiente.
En el campo médico, las aproximaciones a la solución de la RAM, aparte de la concienciación, exigen cambios drásticos en las actividades de prescripción, dispensación y administración y control.
• Prescripción: implantación del programa de Uso Racional de Medicamentos -URM- con las guías de Práctica Clinica Basadas en la Evidencia y esquemas de tratamiento por niveles de indicación.
• Dispensación y despacho: exclusivamente en farmacias institucionales autorizadas, prohibiendo cualquier venta de antibióticos sin receta.
• Administración: implantación del programa de Uso Responsible de Antibióticos -URA-con seguimiento al cumplimiento estricto de la prescripción por parte del paciente.
• Control: administrar en línea los programas de fármacovigilania para garantizar la seguridad en el uso de antibióticos.
Atinado como siempre!
Hoy conocí el caso de un paciente programado para prostatectomía en abril. Le han prescrito 30 tab. de tamsulosina 0,4 y 30 tab. de ciprofloxacina 500, administradas 1 diaria de cada una, durante un mes.
Conociendo que la exposición a los antibióticos es un factor de riesgo para el desarrollo de resistencia, es razonable cuestionar si la profilaxis antibiótica quirúrgica -PAQ- prolongada aumenta el riesgo de infecciones por bacterias resistentes a los antibióticos.
Las infecciones antibiótico-resistentes tienen altas tasas de morbilidad y mortalidad, incrementan los días cama ocupada y demandan la administración de antibióticos de cuarta y quinta generación, incrementando costos hospitalarios en forma exponencial.
La PAQ incluye el uso de antibióticos de cualquier clase y cualquier dosis desde 1 hora antes de la incisión hasta el final de la intervención (Norma 14 del programa de cirugía segura, OPS) y se aplica a procedimientos para limitar la infección post operatoria. Si la PAQ estuviera asociada con algún aumento en el riesgo de infecciones post operatorias antibiótico-resistentes, podría alterar la relación riesgo-beneficio de su uso.
Algunos estudios concluyen que el uso de PAQ no se asocia con el riesgo de infecciones post operatorias resistentes a antibióticos, lo cual proporciona alguna seguridad a los cirujanos que eligen usar la PAQ para procedimientos seleccionados y también una guía útil para los programas de uso racional de antibióticos.
Sin embargo, las circunstancias actuales exigen financiar estudios adicionales para definir las relaciones locales entre prescripción – administración (incluido PAQ) y la resistencia.