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Obesidad y diabetesObesidad y diabetes son dos problemas que más perjudican la saliud de los panameños, como lo evidencian los datos del último informe del “Censo de Salud Preventiva” que llevan a cabo el MINSA y la CSS reveló que desde el 2015 han detectado alrededor de medio millón de adultos mayores de 40 años con obesidad o sobrepeso, dislipidemias, hipertensión arterial, diabetes mellitus y enfermedad renal. Recordemos que todas, principalmente la obesidad y las dislipidemias, están directamente relacionadas con la diabetes y que estas cifras corresponden a la población que se acercó a ser atendida, lo que implica que son personas preocupadas por su salud o que sienten mal, lo cual no es el caso de toda la población, por lo que es muy probable que sean muchos los panameños que padecen una Enfermedad crónica como la diabetes y no lo saben porque todavía no les ha dado síntomas. De hecho, la Organización Mundial de la Salud estima que el 8,5% en la población adulta mundial sufre de diabetes. Si le aplicamos ese porcentaje (8.5%) a la población de adultos mayores de 20 años estimada por el INEC para 2016 (2.6 millones), resulta que alrededor de 220,374 panameños pueden estar padeciendo de diabetes y no lo saben. Redoblemos el esfuerzo por encontrar y tratar la obesidad y diabetes.

Obesidad y diabetes

En ese contexto los invito a la lectura y ojala difusión de este artículo en el cual comparto información actualizada de diversas fuentes internacionales y nacionales sobre la obesidad y diabetes, unas de las principales causas de enfermedad, discapacidad y muerte en nuestro país. Espero que nos preocupemos, tomemos conciencia y nos ocupemos de proteger nuestra salud.

Información internacional sobre la diabetes

El primer Informe Mundial publicado por la Organización Mundial sobre esta letal enfermedad nos recuerda que “según las estimaciones, 422 millones de adultos en todo el mundo tenían diabetes en 2014, frente a los 108 millones de 1980. La prevalencia mundial de la diabetes casi se ha duplicado desde ese año, pues ha pasado del 4,7% al 8,5% en la población adulta. Ello supone también un incremento en los factores de riesgo conexos, como el sobrepeso o la obesidad. Además la diabetes provocó 1,5 millones de muertes. Un nivel de glucosa en la sangre superior al deseable provocó otros 2,2 millones de muertes, al incrementar los riesgos de enfermedades cardiovasculares y de otro tipo. Un 43% de estos 3,7 millones de muertes ocurren en personas con menos de 70 años. El documento pone de relieve además que la diabetes y sus complicaciones conllevan importantes pérdidas económicas para las personas que la padecen y sus familias, así como para los sistemas de salud y las economías nacionales por los costos médicos directos y la pérdida de trabajo y sueldos”.

Pero no olvidemos que diabetes forma parte de las Enfermedades no Transmisibles, ENT, responsables a su vez de más de 10 millones de muertes que ocurren cada año en el mundo en personas de edades comprendidas entre los 30 y los 70 años. Todas ellas asociadas en forma directa el consumo de tabaco, el consumo nocivo de alcohol, las dietas insalubres y la inactividad física. Todas relacionadas directamente con la obesidad y diabetes. El diagnóstico precoz, el acceso a tratamientos asequibles de calidad y las medidas pan gubernamentales para reducir los principales factores de riesgo podrían salvar muchas de las vidas que se cobran las ENT. No en vano el Embajador Mundial de la OMS para las ENT señala que “Por vez primera en la historia, mueren más personas de ENT, como las cardiopatías o la diabetes, que de enfermedades infecciosas. Esta pérdida de vidas humanas no perdona a nadie, sean ricos o pobres, jóvenes o viejos, y supone grandes costos económicos para los países. Cuanto más apoyo de la colectividad logremos para las políticas públicas de eficacia demostrada a la hora de salvar vidas, y eso es lo que hará esta Comisión, más conseguiremos progresar en todo el mundo”.

Consiente de la gravedad del problema de salud pública que suponen las ENT, la Organización Mundial de la Salud ha anunciado la semana pasada la creación de una nueva comisión de alto nivel formada por jefes de estado y ministros, empresarios y personalidades destacadas de la sanidad y el desarrollo, la cual propondrá soluciones audaces e innovadoras para acelerar la prevención y el control de las Enfermedades no Transmisibles, ENT, que son las principales causas mundiales de muerte en el mundo: las cardiopatías y neumopatías, el cáncer y la diabetes.

Información nacional sobre la diabetes

Obesidad y diabetesDe acuerdo a estimaciones propias a partir de cifras oficiales de la Contraloría General de la República, a través del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC), en los últimos cinco años la diabetes ha sido responsable directa por el fallecimiento de más de 5,000 personas, de las cuales la mayoría eran mayores de 60 años, afectando casi por igual a hombres y mujeres. En el mismo período alrededor de 25,000 personas fallecieron por causa de enfermedades circulatorias directamente relacionadas a este padecimiento, lo que significa que cada año el país pierde más de 1,000 ciudadanos por causa de la diabetes y 5,000 ciudadanos por enfermedades circulatorias. La diabetes es por lo tanto un importante problema de salud pública y una de las cuatro enfermedades no transmisibles (ENT) que deben ser intervenidas con carácter prioritario, lo cual, en mi opinión, como lo ratifican las cifras señaladas, requiere de un más intenso y efectivo abordaje por parte de nuestras autoridades y la sociedad en su conjunto.

No obstante, reconozco y felicito el esfuerzo de nuestras autoridades de salud desarrollado a través del “censo de salud preventiva”, al que me referí al inicio. También reconozco y felicito el esfuerzo de la Clínica de Diabetes del Hospital Santo Tomás, la cual atiende más de 2,000 pacientes al año, desarrollando un programa que consiste en la educación sobre el manejo y cuidados de la enfermedad, siendo esto un pilar fundamental para el tratamiento de quienes la padecen.

Por su parte como se afirma en el Plan Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional 2017-2021 “…del lado del control y prevención del sobrepeso y la obesidad, se requieren un amplio rango de acciones que fomenten una alimentación saludable, que combinen la implementación de normativas que protejan a la población de los productos no saludables, los incentivos para la producción y consumo de productos nutritivos, y los programas y políticas de educación alimentaria…” Esperemos que se esté ejecutando y que se mantenga y fortalezca con el nuevo gobierno después de 2019.

Obesidad y diabetes ¿qué podemos hacer?

Lo primero es modificar nuestros estilos de vida con medidas sencillas y eficaces para prevenir la obesidad y diabetes o retrasar su aparición, como por ejemplo: alcanzar y mantener un peso corporal saludable; mantenernos activos, practicando al menos 30 minutos de actividad regular de intensidad moderada la mayoría de los días de la semana; evitar el consumo de tabaco, y los excesos de alcohol, puesto que aumentan el riesgo de sufrir diabetes y enfermedades cardiovasculares y; consumir una dieta saludable, que evite el azúcar y las grasas saturadas. Recuerda que la diabetes es un “asesino silencioso” y es posible que algunas personas, en especial las que padecen prediabetes o diabetes tipo 2, no experimenten síntomas al principio.

Adicionalmente debemos estar alertas ante la aparición de cualquier síntoma como puede ser: aumento de la sed, necesidad de orinar con frecuencia, hambre exagerada permanente, pérdida de peso sin causa aparente, fatiga (te cansas con facilidad), irritabilidad y mal genio también sin causa, visión borrosa, heridas, úlceras y llagas que tardan en sanar, infecciones frecuentes, como las infecciones en las encías o en la piel y las infecciones vaginales.

Ante la aparición persistente de estos síntomas, sin otra causa clara, debes acudir a los establecimientos de salud del MINSA, la CSS y las campañas que realice el Censo de Salud.

El personal de salud debe escucharte atentamente con amabilidad y calidez y si eres diabético, de acuerdo a los Centros de Control de Enfermedades, también está obligado (y lo que es bueno allá también lo es acá) a:

  • Hacerte un examen físico completo, de acuerdo a las normas de la institución (peso, talla, presión arterial, fondo de ojo si procede, etc.).
  • Revisar que los pies no tengan llagas, en cada consulta, y practicarte un examen exhaustivo de los pies al menos una vez al año.
  • Hacerte una prueba glicemia y otra de hemoglobina A1c al menos dos veces al año para determinar tu nivel promedio de glucosa en la sangre en los últimos 2 o 3 meses.
  • Hacerte pruebas de orina y sangre para evaluar el funcionamiento de los riñones al menos una vez al año.
  • Hacerte pruebas de sangre para analizar lípidos (grasas): colesterol total; lipoproteínas de baja densidad o LDL (colesterol “malo”); lipoproteínas de alta densidad o HDL (colesterol “bueno”); y triglicéridos, al menos una vez al año.
  • También debes hacerte un chequeo dental dos veces al año, un examen de ojos con la pupila dilatada una vez al año, vacunarse todos los años contra la influenza y ponerse la vacuna contra la neumonía.

Y eso es, ya lo sabes: ¡no seas goloso y gánale a la obesidad y diabetes!

 

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