Este año la celebración del Día Mundial de la Salud Mental se enfoca en la salud mental de los adolescentes. La adolescencia (10-19 años) es un momento único y formativo. Si bien la mayoría de los adolescentes tienen buena salud mental, los múltiples cambios físicos, emocionales y sociales, incluida la exposición a la pobreza, el abuso o la violencia, pueden hacer que los adolescentes sean vulnerables a los problemas de salud mental. Promover el bienestar psicológico y proteger a los adolescentes de las experiencias adversas y los factores de riesgo que pueden afectar su potencial para prosperar no solo son críticos para su bienestar durante la adolescencia, sino también para su salud física y mental en la edad adulta. Por nuestra parte, de acuerdo con las Estadísticas Vitales del INEC entre el 2012 y el 2016 un total de 82 adolescentes panameños se quitaron la vida (suicidio). 74% de estos jóvenes eran hombres y 26% mujeres.
En ese contexto comparto con ustedes el material que nos ofrece la Organización Panamericana de la salud y la Organización Mundial de la Salud sobre la salud mental de los adolescentes.
Mensajes centrales del Día Mundial de la Salud Mental 2018
Ambas organizaciones coinciden en los siguientes puntos:
- “En la adolescencia y los primeros años de la edad adulta se producen muchos cambios: cambio de colegio o de hogar, entrada en la universidad o en el mundo laboral. Para muchos es una época apasionante, pero también puede ser causa de estrés o aprensión. En algunos casos, si no se reconocen y controlan, estos sentimientos pueden causar enfermedades mentales. El uso cada vez mayor de las tecnologías en línea, que sin duda aporta muchos beneficios, también puede generar tensiones adicionales, pues cada vez es mayor la conexión a las redes virtuales en cualquier momento del día o la noche. También hay muchos adolescentes que viven en zonas afectadas por emergencias humanitarias, como conflictos, desastres naturales y epidemias, y los jóvenes que viven estas situaciones son particularmente vulnerables a la angustia y las enfermedades mentales”.
- “La mitad de las enfermedades mentales comienzan antes de los 14 años, pero la mayoría de los casos ni se detectan ni se tratan. Con respecto a la carga de morbilidad entre los adolescentes, la depresión ocupa el tercer lugar. El suicidio es la segunda causa de muerte entre los 15 y los 29 años. El uso nocivo del alcohol y de drogas ilícitas entre los adolescentes es un gran problema en muchos países y puede generar comportamientos peligrosos, como las prácticas sexuales de riesgo o la conducción temeraria. Otro problema son los trastornos alimentarios”
- “Afortunadamente, va en aumento el reconocimiento de lo importante que es ayudar a crear resiliencia mental, desde las edades más tempranas, para poder hacer frente a los retos que plantea el mundo actual. Cada vez son más numerosas las pruebas de que la promoción y la protección de la salud del adolescente es beneficiosa no solo para la salud a corto y a largo plazo, sino también para la economía y la sociedad, pues adultos jóvenes sanos podrán contribuir mejor a la fuerza laboral, a sus familias y comunidades, y a la sociedad en su conjunto”.
- “Es mucho lo que se puede hacer para ayudar a crear resiliencia mental desde edades tempranas con el fin de proteger la salud mental de los adolescentes, evitando la la angustia y las enfermedades mentales entre los adolescentes y los adultos jóvenes, así como para tratar las enfermedades mentales y lograr la recuperación. La prevención comienza por conocer y entender los signos y síntomas precoces que alertan de una enfermedad mental. Los padres y los profesores pueden contribuir a crear en los niños y adolescentes aptitudes que les ayuden a hacer frente a los retos que se encontrarán cada día en casa y en la escuela. En las escuelas y otros entornos comunitarios se puede prestar apoyo psicosocial, y, por supuesto, se puede iniciar, mejorar o ampliar la capacitación de los profesionales sanitarios para que puedan detectar y tratar los trastornos mentales”.
- “La inversión pública y la participación de los sectores social, de salud y de la educación en programas integrales, integrados y basados en evidencias para la salud mental de los adolescentes son esenciales. Esta inversión debe vincularse con programas que den a conocer a los adolescentes y a los adultos jóvenes cómo cuidar su salud mental y que ayuden a sus compañeros, padres y maestros a saber cómo prestar apoyo a sus amigos, hijos y alumnos. Este es el objetivo del Día Mundial de la Salud Mental de este año”.
Promoción de la salud mental de los adolescentes
De acuerdo con la OMS, Las intervenciones para promover la salud mental de los adolescentes apuntan a fortalecer los factores de protección y mejorar las alternativas a los comportamientos de riesgo. La promoción de la salud mental y el bienestar ayuda a los adolescentes a desarrollar la resiliencia para que puedan sobrellevar bien las situaciones difíciles o las adversidades. Los programas de promoción para todos los adolescentes y los programas de prevención para adolescentes en riesgo de problemas de salud mental requieren un enfoque multinivel con plataformas de entrega variadas, por ejemplo, medios digitales, entornos de atención médica o social, escuelas o la comunidad.
Ejemplos de actividades de promoción de la salud mental de los adolescentes:
- intervenciones psicológicas en línea uno a uno, grupales o autoguiadas;
- intervenciones centradas en la familia, como la capacitación en habilidades para cuidadores, que incluyen intervenciones que abordan las necesidades de los cuidadores;
- intervenciones escolares, tales como:
- cambios organizacionales para un ambiente psicológico seguro y positivo;
- enseñanza sobre salud mental y habilidades para la vida;
- capacitar al personal en detección y manejo básico del riesgo de suicidio; y
- programas de prevención basados en la escuela para adolescentes vulnerables a las condiciones de salud mental;
- intervenciones basadas en la comunidad tales como liderazgo de pares o programas de tutoría;
- programas de prevención dirigidos a los adolescentes vulnerables, como los afectados por entornos humanitarios y frágiles, y los grupos minoritarios o discriminados;
- programas para prevenir y manejar los efectos de la violencia sexual en adolescentes;
- programas multisectoriales de prevención del suicidio;
- intervenciones multinivel para prevenir el abuso de alcohol y sustancias;
- educación sexual integral para ayudar a prevenir conductas sexuales riesgosas; y
programas de prevención de la violencia.
Por su parte el informe “Salud para los adolescentes del mundo: Una segunda oportunidad en la segunda década”, nos ofrece información para ayudarnos a mejorar y mantener la salud de los adolescentes del mundo. Es un informe dinámico, multimedia y en línea, que explica por qué los adolescentes necesitan una atención especial, distinta de la que hay que prestar a niños y adultos. En él se presenta un panorama mundial de la salud de los adolescentes y los comportamientos relacionados con la salud, apoyado por los datos y tendencias más recientes, y se examinan los factores que influyen en su salud y sus comportamientos. Asimismo, se exponen los puntos de vista de los propios adolescentes sobre sus necesidades de salud.
Para terminar, les invito a la lectura crítica del Plan de Acción sobre Salud Mental 2015-2020. El plan ofrece líneas de acción estratégicas proteger la salud mental de los adolescentes, aumentar el acceso a servicios adecuados y para proteger los derechos humanos de las personas con trastornos mentales en países de ingresos medios y bajos.
Y recuerda: ¡hay muchas cosas que puede hacer para mantenerte mentalmente fuerte. ¡Si crees que puedes estar cayendo en una depresión, habla con alguien de tu confianza o pide ayuda profesional!