Los jefes de Estado y de Gobierno que asisten a la Asamblea General de la ONU se han comprometido a adoptar 13 nuevas medidas para combatir las enfermedades no transmisibles, muchas de ellas causadas por el tabaquismo, el alcoholismo y el abuso de los dulces, la falta de actividad física y la contaminación del aire. Se destacan entre ellas la limitación de la publicidad de las bebidas alcohólicas, la prohibición de fumar en determinados espacios y los impuestos a las bebidas azucaradas.
Un 70 por ciento de las muertes en todo el mundo se producen por enfermedades como el cáncer, la diabetes y dolencias cardiacas y respiratorias. El 85 por ciento de los fallecidos vivían en países en desarrollo. En Panamá, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, INEC, durante el 2016 el 57% de las defunciones ocurridas en el territorio nacional (10,300) fueron consecuencia de las principales enfermedades no transmisibles. Las enfermedades crónicas no transmisibles están relacionadas en forma directa con estilos de vida asociados a factores de riesgo para la salud y la vida (alcohol, tabaco y azúcar), y con la insuficiente capacidad de nuestro sistema público de salud para la promoción de la salud, prevención y tratamiento oportuno y apropiado.
En ese contexto les presento a continuación un extracto del comunicado de Prensa que ofrece la ONU sobre la Declaración de guerra contra el alcohol, el tabaco y el azúcar, Lo acompaño con un resumen de las Intervenciones para promover hábitos saludables, que corresponden con las nuevas medidas para combatir las enfermedades no transmisibles, las que compartí en mi reciente publicación sobre el tema de las ENT. Supongo que nuestro presidente firmó la Declaración (pues estuvo presente) y espero que le esté girando las correspondientes recomendaciones a nuestras autoridades de salud.
Extracto de la Nota de Prensa de la ONU
“Estas enfermedades roban a la gente la capacidad de ganarse la vida y alimentan un ciclo de pobreza para las familias y comunidades”, dijo la vicesecretaria general, Amina Mohammed. “El coste es enorme, no solo para las personas afectadas, sino para los presupuestos nacionales, los sistemas de salud y la economía global”.
Las expectativas de futuro no son buenas si no se toman medidas urgentes. Son enfermedades directamente relacionadas con el estilo de vida actual y la degradación del medio ambiente. El aire, cada vez más contaminado, mata a siete millones de personas al año. Y en un mundo en el que aún se lucha para acabar con el hambre, el sobrepeso y la obesidad están por los aires.
Estas enfermedades, dijo Mohammed, requieren promover la prevención y la sanidad universal.
Precisamente, a los países que se niegan a crear un sistema de salud pública argumentando que tiene un costo muy alto, el director de la Organización Mundial de la Salud les recordó que, por cada dólar invertido en prevención, se recuperan siete.
El Dr. Tedros detalló algunas de las nuevas medidas para combatir las enfermedades no transmisibles, que propone su Organización como campañas de educación pública sobre hábitos saludables, vacunas contra el virus del papiloma para evitar el cáncer de cérvix o tratamientos contra la hipertensión y la diabetes. La OMS estima que estas políticas podrían conducir a un crecimiento económico de 350 millones de dólares en países de ingresos medios y bajos de aquí a 2030.
Para hacer visible la magnitud del problema, Dr. Tedros pidió a los presentes que se pusieran de pie si habían sufrido una de estas enfermedades o perdido a un ser querido por ellas. Poco a poco los panelistas y asistentes se fueron poniendo en pie. “No veo a nadie sentado. Ahora multiplíquenlo por 82.000. Eso da 41 millones de personas que mueren prematuramente cada año”.
En la declaración política aprobada, también se hace un llamamiento a la industria alimentaria para que reduzca los contenidos de sal, azúcares libres, grasas saturadas y ácidos grasos trans de producción industrial; mejore el etiquetado nutricional de los alimentos y limite la comercialización de alimentos y bebidas poco saludables para los niños.
“Nadie sobra en la tarea de reducir estas muertes un tercio de aquí a 2030, por eso han incluido a otros actores como la sociedad civil y el sector privado”, explicaba el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, que ha sido reconocido por la OMS por su lucha contra el tabaquismo. “No aceptamos el involucramiento de la industria tabacalera que es la única industria que mata a sus propios consumidores”.
Vázquez subrayó que para vencer a estas enfermedades es necesario contar con “el compromiso político al más alto nivel”. “El costo de la inacción es demasiado alto para la gente; si ignoramos esa realidad o fracasamos en esa lucha, ¿cómo será la humanidad del mañana?”, se preguntó el mandatario uruguayo.
“La enfermedad es asunto de médicos, pero la salud pública es de todos”, aseveró y reiteró: “Ahora, es hora de actuar”.
Nuevas medidas para combatir las enfermedades no transmisibles: intervenciones para promover hábitos saludables
Reducir el consumo de tabaco
- Aumentar los impuestos y precios a los productos de tabaco
- Utilizar el empaquetado neutro/normalizado y/o advertencias sanitarias gráficas grandes en todos los paquetes de tabaco
- Aplicar una prohibición total de la publicidad, la promoción y el patrocinio del tabaco
- Eliminar la exposición al humo de tabaco ajeno en todos los lugares de trabajo interiores, lugares públicos y transportes públicos
- Advertir sobre los daños causados por el consumo y exposición al humo de tabaco por medio de campañas a gran escala
- Ofrecer programas para ayudar a abandonar el consumo del tabaco
Reducir el uso nocivo de alcohol
- Aumentar los impuestos a las bebidas alcohólicas
- Aplicar prohibición o restricción integral a la publicidad del alcohol
- Aplicar restricciones a la disponibilidad física de alcohol al por menor
- Promulgar y aplicar legislación sobre conducción bajo los efectos del alcohol y de límites de concentración de alcohol en la sangre
- Ofrecer intervenciones psicosociales a las personas que consumen alcohol de forma peligrosa y nociva
Promover dieta saludable
- Reducir la ingesta de sal: reformulando productos alimenticios y fijando niveles objetivo de contenido de sal en alimentos y comidas, ofreciendo opciones con menos contenido de sodio en instituciones públicas, promoviendo un cambio de comportamiento mediante campañas en los medios de comunicación, incluyendo etiquetado en la parte frontal de los envases
- Eliminar las grasas trans industriales en la cadena alimentaria
- Aumentar los impuestos en las bebidas azucaradas para reducir el consumo de azúcar
Promover actividad física
- Promover la actividad física a través de campañas en los medios de comunicación y otros programas comunitarios educativos, medioambientales y motivacionales
- Proporcionar asesoramiento en materia de actividad física y derivación de pacientes en el marco de los servicios básicos de atención primaria
Conclusión
No hay excusa para la inacción, pues las nuevas medidas para combatir las enfermedades no transmisibles, no son tan nuevas y son conocidas por los gobiernos y la población. Se dispone de soluciones basadas en pruebas científicas, el gobierno no las aplica con el compromiso que debiera, garantizando la aplicación de éstas, bien sea mediante la formulación de legislación, normas y criterios, o a través de la inversión. Por otro lado, la sociedad mantiene sus estilos de vida nocivos que contribuyen al desarrollo de enfermedades y muerte.