Este año 2022 el tema de la Semana Mundial de la Lactancia Materna es Impulsemos la Lactancia Materna: Apoyando y Educando. UNICEF y la OMS hacen un llamamiento a los gobiernos a fin de que asignen más recursos para proteger, promover y apoyar las políticas y los programas de lactancia materna, especialmente los que están dirigidos a las familias más vulnerables que viven en situaciones de emergencia.
Comparto principales mensajes de Nota de Prensa de la OPS y la declaración conjunta de la Directora Ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, y del Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Además los invito a la lectura de mi artículo previo sobre el tema.
Recomendaciones de la OPS
La OPS/OMS sigue recomendando que se cumplan las pautas estándar de alimentación infantil durante la pandemia de COVID-19. Las pautas estándar de alimentación infantil son:
- Inicio de la lactancia materna dentro de una hora después del nacimiento,
- Lactancia materna exclusiva hasta que los bebés tienen seis meses de edad, y
- continuación de la lactancia materna junto con alimentos complementarios nutricionalmente adecuados y seguros, hasta los dos años de edad o más allá.
Los beneficios de la lactancia materna y la crianza de la interacción madre-bebé para prevenir la infección y promover la salud y el desarrollo son especialmente importantes cuando los servicios de salud y otros servicios comunitarios se ven interrumpidos o limitados.
Se debe apoyar a las madres y los bebés para que permanezcan juntos y practiquen el contacto piel con piel y/o el cuidado de canguro, independientemente de que ellos o sus bebés tengan o no una infección por el virus COVID-19 sospechosa, probable o confirmada. Se debe proporcionar asesoramiento sobre lactancia materna, apoyo psicosocial básico y apoyo práctico de alimentación a todas las mujeres embarazadas y madres con bebés y niños pequeños.
Protección de la lactancia materna en Panamá
En Panamá, la Ley 135 del 23 de marzo de 2020, reformó la Ley 50 de 1995 que protege y fomenta la lactancia materna, la cual establece que:
- Toda institución, pública o privada, deberá contar con una sala de lactancia que te permita extraer tu leche materna cómodamente y conservarla bajo las condiciones óptimas hasta el final de tu jornada de trabajo.
- Toda madre que amamante y que trabaje tiene derecho a tiempo dentro de su jornada laboral para extraerse leche materna y almacenarla adecuadamente.
- Toda madre en período de lactancia deberá disponer de un espacio adecuado en su lugar de trabajo público o privado para la extracción, conservación de la leche materna, o si fuera posible, para que pueda amamantar a su hijo hasta los doce meses de edad.
- Todo empleador que ocupe en el local o lugar de trabajo más de veinte mujeres quedará obligado a acondicionar y adecuar una sala de lactancia. Para que las madres puedan extraerse su leche materna o amamantar sin
peligro a sus hijos. - Las universidades oficiales y particulares, las entidades autónomas y semiautónomas, los centros comerciales, los aeropuertos, las empresas e instituciones en general deberán adecuar un espacio para la lactancia materna, debidamente identificado y que cumpla con los parámetros establecidos para tal fin por la Organización Panamericana de la Salud, la Organización Mundial de la Salud y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia.
Semana Mundial de la Lactancia Materna: declaración conjunta de la Directora Ejecutiva de UNICEF, y del Director General de la OMS
Mientras las crisis mundiales siguen amenazando la salud y la nutrición de millones de bebés, niños y niñas, la importancia vital de la lactancia materna como mejor comienzo posible en la vida es más decisiva que nunca. Esta Semana Mundial de la Lactancia Materna, cuyo lema es Impulsemos la lactancia materna: educar y apoyar, UNICEF y la OMS hacen un llamamiento a los gobiernos a fin de que asignen más recursos para proteger, promover y apoyar las políticas y los programas de lactancia materna, especialmente los que están dirigidos a las familias más vulnerables que viven en situaciones de emergencia.
La lactancia materna constituye una fuente de alimentación segura, nutritiva y accesible para los bebés y los niños pequeños durante situaciones de emergencia como las de Afganistán, Yemen, Ucrania, el Cuerno de África y el Sahel. Ofrece una defensa poderosa contra las enfermedades y todas las formas de malnutrición infantil, incluida la emaciación. La lactancia materna también actúa como la primera vacuna del bebé, ya que lo protege contra las enfermedades más frecuentes de la infancia.
Sin embargo, la angustia emocional, el agotamiento físico, la falta de espacio e intimidad y las malas condiciones de saneamiento que padecen las madres durante las situaciones de emergencia implican que muchos bebés no pueden aprovechar los beneficios de la lactancia materna para sobrevivir. Menos de la mitad de los recién nacidos reciben leche materna en la primera hora de vida, y esto los hace más vulnerables a las enfermedades y a la muerte. Y solo el 44% de los bebés toman leche materna de manera exclusiva durante sus primeros seis meses de vida, una cifra que está por debajo del objetivo de la Asamblea Mundial de la Salud del 50% para 2025.
Proteger, promover y apoyar la lactancia materna es más importante que nunca, no solo porque al ser el primer sistema alimentario natural y sostenible del bebé protegemos nuestro planeta, sino también porque promovemos la supervivencia, el crecimiento y el desarrollo de millones de lactantes. Por eso, UNICEF y la OMS piden a los gobiernos, los donantes, la sociedad civil y el sector privado que redoblen sus esfuerzos con el fin de lograr los objetivos siguientes:
- Dar prioridad a la inversión en políticas y programas de apoyo a la lactancia materna, especialmente en entornos frágiles y de inseguridad alimentaria.
- Dotar a los trabajadores de la salud y la nutrición que realizan su labor en los centros sanitarios y en las comunidades de las competencias necesarias para proporcionar a las madres un asesoramiento de calidad y un apoyo práctico que les permita amamantar a sus hijos de forma adecuada.
- Proteger a los cuidadores y a los trabajadores de la salud contra la influencia del mercadeo poco ético de la industria de la fórmula para bebés mediante la aprobación y aplicación plena del Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna, especialmente en los entornos humanitarios.
- Establecer políticas favorables a la familia que proporcionen a las madres el tiempo, el espacio y la ayuda que necesitan para amamantar.