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Rol de la empresa privada en el control de la pandemia de COVID-19El posible rol de la empresa privada en el control de la pandemia de COVID-19, fue definido a principios del año pasado en la Declaración conjunta que suscribieron la Cámara de Comercio Internacional, ICC y OMS. En ese momento, cuando apenas comenzaba la pandemia, pocos en el planeta comprendían que se necesitaría un enfoque de todo el gobierno y de toda la sociedad para responder a la pandemia de COVID-19.

Hoy, luego de dos, tres y hasta cuatro olas de la enfermedad en el mundo, cobra renovada vigencia el compromiso de colaborar estrechamente para garantizar que la comunidad empresarial mundial reciba la información más reciente y fiable, así como orientaciones específicamente adaptadas, que le permitan participar en el control de la epidemia. Démosle un vistazo a la situación de la epidemia en Panamá. Para luego reflexionar sobre el asunto del rol de la empresa privada.

Epidemia de COVID-19 en Panamá: situación al 5 de junio

La epidemia de COVID-19 está fuera control en el país, y nos encontramos al inicio de la tercera ola de la enfermedad. Hay que decirlo así, con todas sus letras y sin ambages, para evitar el exceso de confianza y el triunfalismo anticipado. Tenemos cuatro variantes del virus circulando en el territorio, todas son más agresivas y potencialmente más letales.

Por cinco semanas consecutivas mantenemos un aumento sostenido de los casos reportados de COVID-19; pasando de un promedio de 577.6 casos por millón de habitantes la semana que terminó el sábado 8 de mayo, a 1,076.4 la semana pasada, es decir, ¡casi el doble! Aunque el promedio de defunciones no ha aumentado, tampoco ha disminuido, y las hospitalizaciones, tanto en salas como en cuidados intensivos, comienzan a mostrar una preocupante tendencia al aumento, reportándose hoy 397 pacientes en sala y 66 en cuidados intensivos. Hoy también se reportan 8,449 de casos activos, 841 nuevos contagios y 6 defunciones.

La empresa privada en el control de la pandemia de COVID-19

Por otro lado, la positividad de las pruebas de laboratorio también ha aumentado, llegando a 6.7% el sábado pasado, por encima del 5% necesario para controlar la epidemia; lo que significa que hay cientos de miles de panameños que están positivos sin saberlo, y como muchos no cumplen con las medidas de seguridad necesarias para protegerse y proteger a los demás, circulan muy tranquilos diseminando la enfermedad. La única buena noticia en este escenario es que mantenemos un intenso programa de vacunación que, hasta la semana pasada ha reportado más de 1.1 millones de dosis aplicadas en todo el territorio nacional. Pero eso no es suficiente todavía para controlar la epidemia, pues estamos muy lejos del 70% necesario para la inmunidad colectiva necesaria.

¿Qué manifiestan los empresarios y negociantes?

Por su parte muchos empresarios manifiestan, y con razón, que se necesita abrir totalmente los negocios para recuperar la economía. Pero ¿cumplen esos empresarios con las medidas para garantizar la seguridad en sus negocios? Aunque muchos así lo hacen, no son todos, y son frecuentes las noticias de hoteles, restaurantes, bares, estadios, repletos de gente, sin guardar las mínimas medidas de seguridad, lo cual se traduce, en el corto plazo, en un aumento de enfermos. Así no se puede. No hay apertura económica posible, hasta que no se controle la pandemia. Y no hay dilema entre economía y salud. Se deberá controlar la transmisión del coronavirus antes de pensar en reactivar la economía totalmente. De lo contrario ya sabemos lo que puede pasar, nada más hay que darle un vistazo a la situación en nuestros países vecinos.

Por su parte la empresa privada también tiene que cumplir con lo que le corresponde para contener el avance de la epidemia, minimizando la probabilidad de transmisión y el impacto en la sociedad. En este sentido, para apoyar a la empresa privada en en control de la epidemia de COVIS-19, el gobierno nacional, de forma coordinada con el Consejo Nacional de la Empresa Privada, ha emitido desde inicios de la pandemia un total de 947 normativas. No hay espacio en esta entrega para compartir el texto de todas, pero recomiendo a los interesados bajarlas de la página Web del CONEP.

Adicionalmente, el posible rol de la empresa privada en el control de la pandemia de COVID-19, fue definido a principios del año pasado en la Declaración conjunta que suscribieron la Cámara de Comercio Internacional, ICC, y la Organización Mundial de la Salud.

Declaración conjunta de la ICC y la OMS: Un llamamiento a la acción sin precedentes dirigido al sector privado para hacer frente a la COVID-19

Los firmantes comenzaron reconociendo que, “la pandemia de la COVID-19 es una emergencia sanitaria y social mundial que requiere una acción efectiva e inmediata de los gobiernos, las personas y las empresas. Todas las empresas tienen un papel esencial que desempeñar minimizando la probabilidad de transmisión y el impacto en la sociedad. La adopción de medidas tempranas, audaces y eficaces reducirá los riesgos de corto plazo para los empleados y los costos de largo plazo para las empresas y la economía”.

La ICC también “contribuirá a mejorar las corrientes de información sobre el brote de coronavirus sondeando su red mundial del sector privado para trazar el mapa de la respuesta empresarial a escala mundial. De ese modo se alentará a las empresas a adoptar enfoques preventivos apropiados y se generarán nuevos datos y conocimientos que servirán para apoyar los esfuerzos gubernamentales internacionales”. La Declaración hizo cinco llamados a la acción

  1. El ICC respalda firmemente el llamamiento lanzado por la OMS a los gobiernos nacionales de todo el mundo para que adopten un enfoque basado en la participación de todo el gobierno y de toda la sociedad en respuesta a la pandemia de la COVID-19. Reducir la propagación de la COVID-19 y mitigar su impacto debería ser una de las prioridades máximas de los jefes de Estado y de gobierno. Las medidas políticas deben coordinarse con los actores del sector privado y la sociedad civil para lograr máxima resonancia y eficacia.
  2. Los gobiernos deben comprometerse a habilitar todos los recursos necesarios para combatir la COVID-19 con la mínima demora posible y garantizar el funcionamiento efectivo y eficiente de las cadenas transfronterizas de suministro de productos médicos y otros bienes esenciales.
  3. La ICC y la OMS alientan a las cámaras de comercio nacionales a trabajar en estrecha colaboración con los equipos de las Naciones Unidas, incluidas las oficinas de la OMS -si las hay-, en sus respectivos países y a designar centros de coordinación para coordinar esta colaboración.
  4. La ICC alienta a sus miembros a apoyar las actividades de respuesta nacionales de sus respectivos países y a contribuir a la respuesta mundial coordinada por la OMS a través de covid19responsefund.org.

En aquel compromiso conjunto, la ICC, de la cual forma parte nuestra CCIAP, alentó a sus miembros a apoyar las actividades de respuesta nacionales de sus respectivos países. Por nuestra parte, la CCIAP, señaló al inicio de la epidemia en el país que: “los empresarios del país darán observancia estricta a las acciones encomendadas en el marco del control de la epidemia, relativas a la aplicación de los protocolos, procedimientos y lineamientos definidos por el Minsa y/o la CSS…” Lamentablemente no encontré información sobre el seguimiento a esta Declaración en la página de ICC Panamá, espero que no haya sido letra muerta.

El compromiso adquirido fue formidable y tiene plena vigencia hoy, por lo que hago un llamado a desarrollar plenamente el “enfoque de todo el gobierno y de toda la sociedad” para responder a la pandemia de COVID-19.

La empresa privada en el control de la pandemia: conclusión

Al final el mensaje es claro: cada uno tiene que cumplir con su parte para controlar la epidemia y recuperar la economía. En estos momentos, la una no puede salir adelante sin la otra.

Los ciudadanos debemos vencer la fatiga, recuperar la disciplina ciudadana, comportarnos responsablemente y redoblar las medidas de protección individual. El gobierno por su parte debe fortalecer la trazabilidad, sobre todo en la provincias y corregimientos donde hay mayor incidencia de la enfermedad; incrementar la secuenciación genómica para identificar y localizar las variantes circulando; fortalecer la capacidad de resolución de su red de establecimientos de salud; velar por el cumplimiento de las leyes y normativas, aplicando con firmeza las sanciones que correspondan; y ahora, ampliar la búsqueda internacional de vacunas de la nacionalidad que sea, pero de efectividad demostrada, para inmunizar a todos los panameños, desarrollando una nueva estrategia que permita los barridos sistemáticos en provincias y comarcas, priorizando aquellas con mayor circulación del virus.

El sector privado también tiene su hoja de ruta trazada, y hay algunas medidas inmediatas para frenar el avance de la epidemia. Son imperativas y no se están cumpliendo cabalmente en todos los espacios y en todos los momentos. Veamos: la reducción del aforo permitido en los establecimientos y medios de transporte, de forma tal que el distanciamiento social sea efectivo, comenzando por la toma de temperatura y vigilar que cada cliente tenga mascarilla puesta en todo momento; la implementación del sistema de reserva para evitar aglomeraciones desmedidas de clientes en bares, restaurantes y otros afines; los clientes a su vez deben tomar conciencia que la vida ya no es como antes de la pandemia, y sumarse a los esfuerzos de gobierno y empresa privada, cumpliendo a cabalidad con las medidas de bioseguridad.

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