Los niños panameños comenzaron esta semana, de forma virtual, su año escolar 2021; es una muy buena noticia, pero urge cerrar la brecha digital para cumplir con los procesos educativos que necesita nuestra niñez, que ha sufrido en este año, un gran daño académico, además de la lesión en su desarrollo necesario para alcanzar la libertad plena, productiva y feliz.
Aunque inicialmente será virtual, la meta debe ser, y así lo ha dicho el Presidente, que el período lectivo termine con estudiantes y docentes en las aulas. Pero ¡cuidado!, el logro de esta meta no será automático. Debe ser, como señala la OPS en su informe epidemiológico 48, “un proceso planificado y basado en una evaluación de riesgo”. Dependerá entonces de la situación de la epidemia de COVID-19 a nivel local; de la capacidad de las escuelas para adaptar sus sistemas para funcionar de manera segura y; de los efectos del cierre de escuelas en términos de pérdidas educativas, equidad, salud general y bienestar de los niños. En ese sentido, es importante subrayar que, solo podremos conseguir un retorno presencial a las aulas de manera segura y gradual, si redoblamos el cumplimiento con las medidas de salud pública individuales e institucionales que ya conocemos.
En ese contexto, el objetivo de ahora, es garantizar que el aprendizaje virtual sea efectivo en esta etapa. Para ello será necesario, como manifiesta recientemente UNICEF en su Carta Abierta, “cerrar la brecha digital para ayudar a brindar una educación de calidad para todos”. Lo cual no será nada fácil, pues, también de acuerdo con UNICEF, en el momento del cierre de las escuelas, “casi un 30% de los niños en edad escolar del mundo no contaban con acceso a la educación a distancia. De hecho, solamente poco más de la mitad de los hogares de la mayoría de los países del mundo disponen de acceso a internet”.
Panamá no escapa a esta realidad, pues la brecha digital es importante. De acuerdo con el más reciente Indice Pobreza Multidimensional (2018), el 16.1% de los niños pobres multidimensionales carecía de educación y formación temprana. De ellos, el 5.9% estaba privado de acceso a Internet, lo cual les impedirá el aprovechamiento de tecnologías y su accesibilidad universal y hará, por ende, imposible para estos niños, mejorar su condición de bienestar, porque no se podrán conectar con las oportunidades que ofrecerá el nuevo año lectivo virtual, para alcanzar todo su potencial. Hoy esa cifra debe haber aumentado de forma considerable, de hecho, los datos sobre acceso a TIC en Panamá muestran que sólo el 58%, de la población usó Internet en el año 2017; por lo que, es un imperativo cerrar la brecha digital y avanzar con prontitud a la versión presencial de la educación.
Para ayudar a cerrar la brecha digital, UNICEF propone la campaña Reimaginar la Educación. De acuerdo con el Fondo para la Infancia, la campaña está “transformando el aprendizaje y el desarrollo de habilidades con el fin de ofrecer una educación de calidad para cada niño a través del aprendizaje digital, la conexión a internet, los dispositivos, la asequibilidad de los datos y la participación de los jóvenes”. El objetivo, es llegar a 500 millones de niños y jóvenes antes del final de 2021, y esperan que a 3,500 millones antes de 2030. “Junto con numerosos aliados del sector privado y los gobiernos, esta tarea requerirá medidas como distribuir libros de texto a ubicaciones remotas, promover la retransmisión de programas educativos de radio y ofrecer educación a los niños allá donde vivan, incluso a través de mensajes de texto, grupos de WhatsApp y podcasts.
En ese sentido, la representación de UNICEF en nuestro país, ofrece asistencia técnica, abogando, construyendo alianzas estratégicas, e implementando proyectos emblemáticos que contribuyan a garantizar de forma plena los derechos de los niños. También tenemos un sector empresarial próspero, de hecho, la persona más rica de Centroamérica es un panameño. Estoy seguro de que nuestro gobierno, para cerrar la brecha digital, sabrá aprovechar la oferta de cooperación de la ONU y la solidaridad de las personas más ricas del país.
Pero, ya sea ahora, cerrando la brecha virtual para garantizar el necesario ámbito virtual, o en el futuro cercano, cuando recuperemos los espacios escolares tradicionales, la imagen objetivo debe ser fortalecer nuestro sistema educativo como requisito indispensable para desarrollar la Educación que nos permita alcanzar la libertad plena, medida en términos de nuestra capacidad para disminuir las desigualdades erradicar las injusticias y las barreras que nos impiden llevar una vida digna; pues el hombre y la mujer educados integralmente, libres de la ignorancia, tienen la capacidad para hacerle frente de forma inteligente a los retos que les presenta la cotidianidad de la vida.
Para finalizar, subrayo que, la educación constituye la mejor vacuna contra la desigualdad, y las injusticias. No hay causa que merezca más alta prioridad que la protección y el desarrollo del niño. Si este derecho no está garantizado de forma efectiva, jamás seremos libres para alcanzar la estabilidad y el progreso en nuestro país.
Gracias y felicitaciones, estimado Jorge!
Gracias por la lectura querido amigo!
Hola. Leí su artículo ya que estoy buscando un posible tema para una investigación en el postgrado en docencia que estoy tomando en la UMIP. Me interesé por el tema de la Brecha Digital porque tratamos el tema de las Tics en el módulo anterior. Por lo que entiendo, la brecha digital que ya existía y que se intensificó durante esta pandemia, afecta sobre todo a la población de escasos recursos y seguirá afectando aún después de la retomada de la presencialidad en las aulas de clases.
Podría usted sugerirme algún tema que pueda investigarse, claro que de manera sencilla, en un corto espacio de tiempo a manera de trabajo de curso, pero que a la vez aporte algún conocimiento a las soluciones y programas que deben desarrollarse para que se reduzca esta brecha digital?
Hola, dele una mirada a: https://www.cepal.org/es/publicaciones/6094-estrategias-programas-experiencias-superacion-la-brecha-digital-universalizacion